Nintendo anunció una consola 3D que no necesitaba gafas para que todos disfrutásemos del efecto. Sí, la jugada les ha salido bien y sí, la pantalla es lo prometido. Pero con matices. Diversos problemas herederos directos de la tecnología que utiliza, llamada Paralax Barrier, acaban lastrando la experiencia.
Consumo elevadísimo de batería en el modo 3D, imágenes oscuras, desenfoques momentáneos, ángulo de visión limitado… un resumen de handicaps que pueden no importarte a la hora de jugar con ella (a mi no me importan en exceso) pero que están ahí. Por eso en el MIT se han puesto las pilas y han desarrollado una nueva tecnología que mejora le experiencia en todas sus facetas. La han llamado HR3D y promete estar dando guerra en unos años.
Mantiene la autonomía sin sangrar a la batería cuando se activa, no reduce el brillo y amplía el ángulo de visión lo suficiente como para que diversas personas puedan ver el efecto 3D sin gafas en pantallas grandes.
En Xataka nos explican cómo funciona el nuevo sistema que representa una evolución del Paralax Barrier que conocemos actualmente y que se usa en Nintendo 3DS.
La tecnología HR3D también usa dos pantallas pero en este caso colocadas en forma de capas donde la superior muestra patrones adecuados para la imagen mostrada abajo y no fijos. Además, las “marcas” no son verticales (que obligan en la consola 3DS de Nintendo a estar frente a la pantalla) sino que se distribuyen en todas direcciones para que el ángulo de visión aumente.
Eso sí, no esperéis que llegue de forma inmediata al mercado. Al menos no a una consola portátil ya que la cantidad de recursos que necesita para ir variando el patrón de la pantalla superior es muy elevada y el sentido común aconsejaría diseñar un procesador destinado especialmente para eso. Dadle unos añitos, esperad a que la tecnología sea un poco más barata y podremos quemar esas gafas actuales en una hoguera en la noche de San Juan.
Vía | Xataka
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