El primer juego de Riot Games fuera del universo League of Legends ha demostrado ser un éxito tremendo. Gran parte de la culpa la tiene su campaña de beta cerrada a través de Twitch, que le ha granjeado cientos de miles de espectadores continuos. Aunque, como siempre, hay una letra pequeña.
Esa es Vanguard, un sistema anti-cheat que necesita acceso a todos los datos de nuestro ordenador y es obligatorio para ejecutar Valorant (aunque podemos desactivarlo si no estamos jugando). Un sistema que de momento parece funcionar a pesar de la polémica, pues Riot ya ha efectuado su primera oleada de baneos de tramposos.
Un total de 8.873 jugadores han sido expulsados del shooter de Riot. Así lo ha confirmado Phillip Koskinas, ingeniero de sistemas anti-cheat en la compañía de League of Legends.
located a VALORANT universe where there were 8873 less cheaters and moved us all into it, please be careful as your bones may've shifted during dimensional travel
— Phillip Koskinas (@deteccphilippe) May 12, 2020
He localizado un universo de Valorant donde hay 8.873 tramposos menos y nos he trasladado a todos hacia él. Por favor tened cuidado, ya que vuestros huesos pueden haberse visto afectados por el viaje interdimensional.
En el portal Kotaku han hablado con Koskinas para preguntarle qué tipo de método han usado, pero como era de esperar, este no suelta prenda, o de lo contrario los tramposos podrían averiguarlo y sortearlo: "No puedo decir el método (aunque lo van a acabar averiguando) pero no es tan simple".
Así que en fin, parece que a los cheaters les toca comerse la cabeza un poco hasta que puedan descubrir cómo no ser baneados del juego, y esperemos que no lo consigan nunca. La pregunta es, ¿cuánto habrá tenido que ver Vanguard en todo esto?
Ver 9 comentarios