Análisis de The Elder Scrolls Online: High Isle, una paradisíaca isla con la que TESO inicia una nueva etapa sumando lo que más necesitaba

Perderme por el archipiélago de las Systres ha sido una de las mejores decisiones que he tomado desde que decidí regresar a The Elder Scrolls Online en busca de nuevas aventuras. Viciarme sin remedio al nuevo juego de cartas Historias de homenaje, quizás no tanto. The Elder Scrolls Online: High Isle supone esa bocanada de aire fresco que pedía el universo de fantasía online de Bethesda aportando más riqueza al jugador y una trama que engancha de manera genuina. El muy prometedor inicio de un nuevo capítulo dedicado al Legado de los Bretones que nace desde una nueva gran región jamás vista en The Elder Scrolls y que ha sido creada expresamente para la ocasión.

Porque lo bueno de ofrecer una región inesperada es que puedes crearla a tu gusto, y cuesta muy poco quedarse prendado de Isla Alta y Ameno. Sus  costas, las grandes áreas amuralladas con influencia mediterránea y esas zonas habitadas mucho más humildes; sus entornos naturales con bosques profundos, praderas regadas de girasoles y hasta zonas de actividad volcánica. La nueva región en la colosal Tamriel es un acierto que enriquece el universo de aventura y fantasía de Bethesda y le dan un nuevo valor de cara al jugador. A quien emprendió el viaje en 2014, al que ha ido y vuelto de manera intermitente y los que estén a un solo paso de crearse su primer personaje. Sobre todo, ahora que los textos de The Elder Scrolls Online se pueden leer en español. Por fin.

Y para muestra, aquí tienes un adelanto de nuestra primera incursión en Isla Alta a través de un personaje nuevo creado para la ocasión. Y, como verás, no tardaremos demasiado en toparnos con alguna cara conocida dentro del universo The Elder Scrolls.

Lo primero es lo primero: la nueva región del archipiélago de las Systres y todo lo que se cuece en él suponen el gran atractivo de TESO: High Isle. Dicho así parece algo muy básico y simplón, pero a su vez es una manera valiente de desmarcarse de la clásica fórmula de las expansiones y eventos de los MMORPG actuales en la que un gran enemigo con un poder absurdo y antinatural o una amenaza cataclísmica arrasará el mundo si nosotros, los jugadores, no hacemos algo. Otra cosa muy distinta es que en Isla Alta, la isla natal de la élite de los bretones, no haya un conflicto latente entre el bien y el mal a punto de estallar.

Por supuesto, además de tomar cartas en ese conflicto tendremos por delante y montones de criaturas y seres que mantendrán siempre el espíritu de aventura encendido, una trama que da inicio al arco de El Legado de los Bretones y cuya duración Bethesda ha establecido en 30 horas, aunque perderse y dar rodeos acaba siendo inevitable, y un nuevo juego de cartas coleccionables que redondea el valor del propio juego: Historias de homenaje. Podemos darle la espalda a todo lo anterior y deambular libremente con otros jugadores o por nuestra cuenta, claro, pero el gran acierto de The Elder Scrolls Online: High Isle es precisamente cómo se nos presenta la compleja sociedad bretona como jamás se había mostrado.

En VidaExtra hemos abordado el análisis de The Elder Scrolls Online: High Isle partiendo desde dos perspectivas que se complementan entre sí: por supuesto, el punto de partida es la propia Isla Alta y lo que ésta ofrece al jugador en lo relativo a aventuras y desafíos. Pero no menos importante es lo que aporta la actualización 34 del juego base y cómo esta abre la puerta a millones de jugadores a través de su localización al español. Así que nos armamos de valor e hicimos una locura: en lugar de continuar las aventuras de nuestros héroes, creamos un personaje desde cero y nos fuimos directos al archipiélago de las Systres. Y no nos fue nada mal.

En la próspera Isla Alta se alzan tres estandartes, y una orden ha jurado acabar con ellos

En una privilegiada localización ubicada al suroeste del Páramo del Martillo y al noroeste de la Isla Estivalia es posible encontrar la isla de Alta Isla y el archipiélago de Sytres. Una región con un clima y una naturaleza que le confieren un estatus paradisíaco conocida en todo el continente por acoger a la élite de los bretones quien, a su vez, alimenta de manera caprichosa a una sociedad feudal. Una sociedad de contrastes entre la abundancia, los mayores excesos y, como se espera de los bretones, las obligaciones no tan glamorosas de las clases bajas.

Algunos bretones más humildes prosperan a su ritmo y los hijos de buena cuna llevan un estilo de vida mucho más acomodado, pero la mayoría se limita a fantasear con codearse algún día con lo mejor y más selecto de la Alta Isla. Otros, sin embargo, tienen planes concretos para darle un violento giro a la situación.

Una orden secreta liderada por el Señor de los Ascendentes ha comenzado a tomar la iniciativa y se mueven entre las sombras para derrocar las tres casas rivales que han gobernado durante años el archipiélago. Sus miembros están convenientemente infiltrados entre todos los estratos sociales de las islas, y pese a que los ideales que promueven sus líderes se basan en destronar y eliminar a los ricos y darles su poder a los pobres, sus causas y métodos atentan directamente contra la estabilidad de Alta Isla, la región Sytres y, por extensión, el futuro de Tamriel.

En The Elder Scrolls Online: High Isle seremos el personaje que creemos, de cualquier raza, género y facción, y no tardaremos en familiarizarnos con el estilo de vida de Alta Isla. A lo bueno siempre se acostumbra uno. De hecho, antes de que nos demos cuenta conoceremos a varias de las personas más influyentes de la isla, quienes nos propondrán encargos y aventuras demasiado interesantes para dejarlos pasar y que nos servirán para ganarnos su confianza y, por supuesto, toda clase de recompensas más el botín que encontremos por el camino.

De manera gradual, en The Elder Scrolls Online: High Isle conoceremos el pasado del archipiélago y la otra realidad no tan cómoda ni tan a la vista. En Isla Alta existe un complejo entramado de desconfianza y traición en el que la tensión entre las tres casas más influyentes que traspasa los muros de sus ciudades. Eso sí, Isla Alta tiene sus problemas, pero se necesitan aventureros en todo el archipiélago.

Sin alejarnos mucho de Isla Alta, los bretones utilizan la isla Ameno como una empalizada en la que recluyen a lo peorcito de sus calles. Eso sí, a aquellos con los que no tienen demasiadas intenciones de lidiar los sueltan en el bosque. ¿Les dan la libertad? Bueno, sin entrar demasiado en la trama digamos que les someten a una prueba de selección natural. Mientras tanto, a lo largo de las islas de Systres se han comenzado a manifestar fisuras volcánicas inestables, lo cual ha afectado a la fauna, el paisaje y a la tranquilidad de los Druidas.

A lo largo del viaje también podremos tomar parte en pequeñas historias, conocer o volver a encontrarnos con personajes excepcionales del universo de The Elder Scrolls y vivir toda clase de aventuras a través de misiones secundarias o por nuestra cuenta. Porque independientemente de lo que se esté cociendo en Alta Isla, los entornos de The Elder Scrolls Online: High Isle se prestan de maravilla a ello.

Qué me voy a encontrar si empiezo TESO desde cero y me voy a Isla Alta

Han tenido que pasar ocho largos años, pero The Elder Scrolls Online ha sido localizado al español. Más vale tarde que nunca. Si bien, para millones de jugadores el idioma no ha sido una barrera, derribarla es algo que nos invitará a abrir más libros al pasar por las bibliotecas, extendernos más en los diálogos y, por supuesto, entender un poquito mejor que es lo que está pasando a rasgos generales. Ahora bien, estamos hablando de los textos: los diálogos hablados siguen siendo en la lengua de Shakespeare.

La versión 43 de The Elder Scrolls Online introduce nuevas mejoras que abren el juego a muchos más fans del rol y la fantasía: más allá de la localización al español nos encontramos con nuevas opciones de accesibilidad y una mejora en la rueda de accesos rápidos. Y si ya habíamos avanzado lo suficiente, Bethesda aprovecha y busca que nos sintamos todavía más cómodos al regresar añadiendo contenido en forma nuevas casas, más decoración e invitados. Todos salimos ganando con la actualización, salvo los monstruos que nos salgan al frente.

A partir de aquí toca plantearse lo esencial: cómo es la experiencia de jugar a TESO, qué necesita mi personaje si quiero ir directo a los contenidos de The Elder Scrolls Online: High Isle y hasta qué punto un nuevo aventurero puede divertirse  abrirse paso en un MMORPG con casi una década a sus espaldas. La respuesta a esta última te la adelantamos: si compramos la expansión, en veinte minutos, y tras aprender a usar la magia y la espada, habrás viajado al paraíso insular bretón y posiblemente tendrás suficiente oro o cosas que vender como para darte un capricho.

The Elder Scrolls Online es un juego de rol y aventuras clásico que puede jugarse en primera o tercera persona. Y pese a que todo gira en torno al personaje creado, el verdadero protagonista siempre es el rico mundo que se abre ante nosotros con una ambientación espectacular, un trasfondo muy rico y elaborado y un libertad y culto al detalle propios de Bethesda: además de interminables líneas de diálogo, la mitad de las jarras, prácticamente todas las estantería y cada enemigo vencido tienen algo que podremos guardar en el inventario, y aunque eso suena de maravilla, no tardaremos en ser selectivos.

Los combates son en tiempo real y le dan ritmo a la exploración, el otro pilar esencial del juego junto con la historia viva que nos rodea. Lógicamente, dada su naturaleza de MMORPG (juego de rol multijugador en un enorme mundo abierto online) se promueve que compartamos aventuras y espadazos con otros jugadores con los que nos toparemos en pantalla, aunque está en nosotros ir por libre y viajar a nuestro ritmo. Pese a que existen montones de grandes historias y una cantidad absurda de pequeñas tramas que nos tendrán dando vueltas como locos, lo que hagamos en Tamriel es cosa nuestra.

El punto de partida de cada jugador obedece al personaje creado, pero por lo general se nos pone en un contexto en el que se nos guía hasta familiarizarnos con lo esencial: la exploración, el ataque, la infiltración y la gestión de personaje e inventario. En nuestro caso, declinamos continuar la partida y crear un personaje aprovechando que estarían todos los textos en castellano y la bienvenida en forma de tutorial nos deja ante una sala con montones de portales que nos llevan directos a todas las regiones conocidas de Tamriel, incluyendo -cómo no- el archipiélago de las Systres a través de Alta Isla.

A partir de aquí una puntualización: los contenidos de The Elder Scrolls Online: High Isle son parte de una expansión que no se incluye en el juego base y, además, forman parte del gran plan anual de The Elder Scrolls Online, cuya temática es El Legado de los Bretones. Tras las 30 horas de contenido de esta primera etapa para el juego están por venir nuevas historias centradas en una raza con un misterioso vínculo con las artes mágicas. Eso sí, hasta que llegue el momento de continuar la historia, hay montones de cosas que hacer. Entre ellas, jugar a Historias de homenaje.

The Elder Scrolls Online: High Isle es exactamente lo que necesitaba TESO

De manera muy merecida, The Elder Scrolls Online se ha expandido en ciclos que nos llevaban, por lo general, a luchar en mazmorras y cuevas o explorar localizaciones ya conocidas ambientadas 1.000 años antes de los acontecimientos de The Elder Scrolls V, el nuevo lote de contenidos sigue esa misma tónica, desde luego, pero la manera de romper con el ciclo juega totalmente a su favor.

• De primeras, en The Elder Scrolls Online: High Isle se nos traslada a una localización que no solo es completamente nueva, sino que rebosa historia viva y ofrece unos paisajes naturales o núcleos habitados en los que da gusto perderse, incluyendo prados abiertos y repletos de girasoles, costas en las que es posible ver restos de enormes navíos protegidos por toda clase de amenazas y hasta una zona condenada y sometida al flujo de la lava.

• Pero es que, además, Bethesda deja convenientemente aparcada la fantasía oscura sin renunciar a la epicidad introduciendo una temática en la que se le da más peso al lore y los entramados sociales. Logrando que los nuevos personajes y las tramas nos importen más y amortiguar la rutina del aventurero haciendo misiones secundarias.

De hecho, The Elder Scrolls Online: High Isle no se descarrila de la exitosa fórmula de Skyrim en lo jugable o en lo argumental, sobre todo en lo que se refiere a la tensión de poder, sino que la usa en su beneficio para aportan nuevos matices a una experiencia que se basa más en el atractivo de sus contenidos que en ofrecer un espectáculo que de forma e identidad al evento anual. Y eso es bueno.

Que los combates con armas y magia no hayan evolucionado lo suficiente desde entonces, no tanto.

Con todo, The Elder Scrolls Online: High Isle arrastra otra serie de complicaciones heredadas de la propia evolución que ha dado el juego y sus recogidas de cable, empezando por cómo se promueve a que gastemos coronas, las cuales se adquieren con dinero real, o la incertidumbre de lo que llegará en futuras actualizaciones una vez hayamos exprimido las 30 horas de juego. Algo que, por otro lado, tienen su razón de ser dada la naturaleza del juego y cómo se ha planteado su hoja de ruta anual.

Dicho lo cual, The Elder Scrolls Online: High Isle tiene un plan alternativo para cuando estemos saciados de vivir aventuras y explorar la nueva región: Historias de homenaje, un nuevo juego de cartas que perfectamente podría ser un juego completo en sí mismo.

Historias de homenaje nace y evoluciona como una trama argumental propia elaborada para la ocasión, pero lo interesante es que además de jugar contra personajes destacados del juego podremos competir con otros jugadores, lo cual incluye un sistema de matchmaking y de clasificación dedicados.

Y ahí no acaba la cosa: en Historias de homenaje hay en juego recompensas jugosas y coleccionables únicos, además de su propio sistema de logros. Lo cual, sumado a su carácter de estratégico, hará que hasta el más osado aventurero se pase más de lo necesario en las tabernas de Alta Isla. Y, por extensión, en The Elder Scrolls Online: High Isle.

La opinión de VidaExtra

Las nuevas regiones de Isla Alta y Ameno son más que una simple extensión de Tamriel aparecida desde la nada, suponen un soplo de aire fresco para el denso universo rolero de The Elder Scrolls Online colmado de atractivos propios y buenas ideas, convenientemente regadas con una historia mayor que va tomando forma a mi propio ritmo y montones de subtramas en las que nos unimos a personajes especialmente pintorescos y lo más granado de la elite bretona.

Que no se me malinterprete: las expansiones anteriores de The Elder Scrolls Online rebosaban contenido y aventuras, pero el atractivo que desprende el archipiélago de las Systres sumado a las rencillas entre las tres casas le sientan de maravilla al conjunto. Emparejando más la experiencia a lo mejor de los libros de Juego de Tronos a través de sus disputas de poder y tramas en los que está presente la codicia, las conspiraciones, la traición y el fanatismo ciego en un mundo de fantasía bello con sus propias raíces podridas.

Con todo, y como ya comentamos, comparar lo que hoy nos ofrece The Elder Scrolls Online: High Isle frente a capítulos anteriores es apresurado e injusto: más allá de las 30 horas de contenido si vamos a tiro fijo -según Bethesda- nos queda la promesa de de los contenidos venideros, dado que el lanzamiento de High Isle supone el punto de partida de El Legado de los Bretones, cuyos planes se extenderán hasta bien entrados 2023. Solo entonces podremos evaluar lo que nos ha ofrecido esta nueva etapa.

Dicho lo cual, regresar a Tamriel siempre es un gustazo. El universo de The Elder Scrolls se expande con nuevas historias jamás contadas y un juego de cartas del que seguiremos hablando en años venideros. De hecho, no me extrañaría que Bethesda hiciese como con Fallout Shelter y lanzase una versión standalone de Historias de homenaje. Porque lo merece.

Ahora bien, mención muy especial a la que considero será la aportación más celebrada de la actualización que acompañó el nuevo capítulo: los textos en pantalla  The Elder Scrolls Online se muestran en español, y Bethesda lo ha preparado todo para que los nuevos jugadores den el salto. Con las aventuras de las expansiones anteriores y, además, un nuevo destino paradisíaco que llega a consolas y PCs de la mano del buen tiempo.

En este aspecto, tengo que confesar que The Elder Scrolls Online: High Isle es exactamente lo que necesitaba y llevaba meses buscando: un pedacito de un denso universo rolero colmado de atractivos propios, una historia mayor que va tomando forma a mi propio ritmo y vistas paradisíacas. Un retiro paradisíaco en forma de videojuego. Una isla perfecta para que los más roleros nos perdamos yendo de aventuras o jugando a las cartas este verano.