DOOM es uno de los principales precursores del género FPS (First-person shooter) o juegos en primera persona. Cualquier juego de disparos que veas en la actualidad tiene influencia directa o indirecta de los juegos clásicos (y más modernos) de DOOM. Sin excepción.
La franquicia ha sabido crecer y adaptarse a las nuevas tecnologías sin perder su esencia. DOOM 2016 es una obra de arte con mayúsculas y el mejor FPS de historia que existe la industria de los videojuegos en mi opinión. Pura esencia DOOM, sencillo, gameplay de puro placer y apartado visual y sonoro (gráficos, arte y música) que te caes de culo. Lo ves actualmente y parece recién salido.
En 2020 llegó DOOM Eternal, un título muy divertido que dividió a muchos jugadores. Si bien mantiene la esencia DOOM y el apartado visual y sonoro de su predecesor, el gameplay se volvió más complejo y caprichoso. Este factor fue el que hizo que no terminase de encajar a algunos jugadores. Muchos esperábamos más de 2016.
En 2021, Bethesda anunció un nuevo videojuego de la franquicia: Mighty DOOM, un título para dispositivos iOS y Android. Fue lanzado en diferentes territorios. Hemos tenido que esperar hasta 2023, concretamente hasta el pasado 21 de marzo, para tenerlo disponible en Google Play y Apple Store. El mismo día recibí el aviso de que ya podía descargarlo.... ¡Y ha sido mi perdición!
Mighty DOOM: esencia DOOM embutida en un juego para móviles
Admito que mi primera reacción al ver el anuncio de Mighty DOOM fue un suspiro de decepción con una leve esperanza de que al menos molase tanto como prometía. "A falta de un DOOM como tal, el Doomguy chiquito puede servir de entrejuego", pensé. Y me equivocaba, porque mola más de lo que imaginé.
El funcionamiento de Mighty DOOM es sencillo como un chupete: escenarios lineales llenos de enemigos y un mini Doomguy que debe masacrar a todos los demonios mientras esquiva ataques y dispara de forma automática. Rollo Vampire Survivors, para que nos entendamos. Puedes jugarlo con un pulgar, dos a lo sumo.
Se trata de una experiencia Roguelike. A medida que superas escenarios, puedes seleccionar una de tres habilidades aleatorias que se acumulan y te vuelven mucho más letal. Por ejemplo: disparo en tres direcciones. Si más adelante lo combinas con hacer rebotar los disparos en las paredes... pues imagina el pifostio que montas en un momento.
Cada poco encuentras una fase de jefe, que básicamente es uno de los enemigos normales en versión grande. La clave del juego es saber posicionarte y esquivar los ataques enemigos. El asunto de disparar ya lo gestiona el Doomguy chiquito. También puedes hacer ejecuciones para recuperar vida, utilizar el lanzacohetes y la motosierra como habilidades especiales, y usar elementos del escenario (portales, plataformas...) para desplazarte más rápido. Actualmente, hay un total de 9 mundos, cada uno con 40 fases.
Las mejoras que seleccionas durante las partidas se pierden al morir, pero hay un componente de progresión permanente: puedes mejorar las estadísticas de tu Doomguy (vida, daño, regeneración...) y subir el nivel tanto de las piezas de equipo como de las armas. Si tienes varias piezas en el inventario, puedes fusionarlas para hacer una más poderosa. Durante las partidas conseguirás monedas y gemas, armas, armaduras y fichas de mejoras.
Puedes elegir entre cuatro mini Doomguys o Slayers, cada uno con una habilidad pasiva especial y su progresión independiente. Uno es gratis y los otros tres son de pago. No me cabe duda que meterán más muñecajos en el futuro. El Doomguy estándar tiene una probabilidad de matar instantáneamente a un enemigo.
Esencia DOOM... y de juego móvil
Por muy maravilloso que me parezca Mighty DOOM, no deja de ser un juego de móvil con todo lo que ello implica: una tienda con posibilidad de comprar monedas, gemas, llaves para cajas y packs especiales, y también tiene anuncios. El sistema de monetización no es abusivo ni demasiado invasivo. Las misiones diarias y lo que consigas durante las partidas es suficiente para progresar poco a poco.
Es posible jugar sin invertir ni un céntimo... aunque los Doomguy molones son de pago. Obvio. Por otro lado, puedes ver un anuncio de uno o dos minutos para resucitar una vez por ronda y para desbloquear algunas cajas que incluyen desde divisas a equipo. Obviamente, cuanto mas cara, mejor loot. Nada nuevo.
Mi única pega realmente negativa es el sistema de Energía, que termina limitando la experiencia de juego durante las sesiones más largas. Como he dicho, es un juego de móvil con todo lo que ello implica. No todo iba a ser masacres, tiroteos y más cosas "DOOMescas".
Mighty DOOM es un juego muy divertido y tremendamente adictivo. Si bien no es lo que esperábamos los fans de la franquicia, no está mal para echar unas partidas de forma casual. El lado positivo es que ahora puedes seguir reventando demonios en cualquier lado, ¡Incluso si la Nintendo Switch se te queda sin batería! Es gratis, así que al menos dale una oportunidad.
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