El primer Kane & Lynch fue un título que dejó un sabor de boca agridulce en críticos y jugadores. De calidad gráfica y jugabilidad cuestionables, defraudó en cierta manera las esperanzas que se habían puesto en él. ¿Por qué entonces una segunda parte?, ¿tenía aquel juego algo especial que lo sobrepusiera a tan importantes lastres?
Han pasado varios años de aquel estreno y el poso que persiste en la mente del jugador se llama carisma. La historia y los personajes que le daban vida han pasado con nota el paso del tiempo, haciendo valer sin duda la actual apuesta de ‘Kane & Lynch: Dogs Days’.
Aquella pareja disfuncional se abastecía en ‘Dead Men’ del mejor cine policiaco de acción de las últimas décadas. Con los ojos (y los oídos) puestos en el cine de Michael Mann y Walter Hill (que a su vez se miran en el gran Sam Peckinpah), la contundencia de los disparos y la presencia de escenas memorables en el juego hacían referencia directa a clásicos modernos como ‘Heat’.
Profesionales del crimen impecablemente trajeados, grandes mochilas a la espalda llenas hasta los topes de dinero robado, armas automáticas,… si hasta el tono de color de la imagen era el mismo en la película y el videojuego.
Eran tal las similitudes que, a la hora de jugar esa escena del atraco al banco yo me dedicaba a huir a pie por las calles avanzando de coche en coche y vaciando cargadores. Fue después cuando me enteré de que simplemente había que esperar a que una furgoneta preparada para la huida hiciera acto de presencia en la puerta del edifico donde nos hallábamos inicialmente parapetados.
‘Dogs Days’ deja de lado la elegancia de sus referentes para introducirse en las peligrosas y oscuras calles de Shangay. De hecho, la influencia cinematográfica es sustituida en esta segunda parte por la influencia televisiva. La textura de la imagen, el pixelado de ciertos elementos que se desean ocultar a la audiencia, el nervioso movimiento de la cámara que revela a un posible reportero detrás de ella,… todos estos elementos nos llevan a un nuevo enfoque de la acción.
Y es que, al contrario que en ‘Dead Men’, donde controlábamos al atormentado Kane, es ahora el desequilibrado y ultraviolento Lynch el protagonista principal de la acción. De esta forma, la mareante realización visual viene a reforzar la expresión de una mente enferma, violenta e impredecible. Todo es más caótico porque todo lo que vemos parece mostrársenos a través de la cabeza de un peligroso psicótico.
‘Kane & Lynch: Dogs Days’ promete y, lo que es quizás más importante en estos momentos antes del estreno, tiene un apoyo tremendo detrás. Que los derechos de la franquicia estén en Hollywood o que una serie de cómics se encuentre en preparación nos dice sobre todo que hay mucha confianza en el proyecto.
El carisma de los personajes y de la historia se mantiene intacto, toca esta vez afinar en los puntos flacos antes mencionados. Desde luego, el equipo de desarrollo ha tenido un buen aliciente, este sector no conoce la frase ‘A la tercera va la vencida’.
Vídeo | Youtube Youtube
Sitio oficial | Kane & Lynch 2: Dogs Days
Ver 42 comentarios