Lo que empezó como un meme parece estar convirtiéndose en una realidad. Tras ser el "hazmerreír" de muchos lectores durante sus primeros capítulos, Kagurabachi ha dado pasos agigantados en los últimos meses y se ha convertido en uno de los grandes pilares de la actual Shonen Jump.
Su nivel es tal que, tras haber enamorado a grandes genios de la industria, ha sido nada más y nada menos que Masashi Kishimoto quien recientemente ha desvelado su amor por esta obra. Al creador de Naruto le está encantando la historia, pero sobre todo, aprecia cómo se tratan los dibujos y el talento nato de su autor para crear los paneles.
"Los dibujos son cautivadores y están llenos de fuerza y emoción. Este talento y estilo es lo que adoran los aficionados al manga", comentó Kishimoto en una de las portadas del último tomo del manga, que está siendo un éxito abrumador en Japón y apunta a ser uno de los grandes titanes del entretenimiento en el futuro.
Así, Kishimoto se une a Takehiko Inoue, creador de obras maestras como Vagabond y Slam Dunk, como seguidor ferviente de esta obra. Paradójicamente, Kagurabachi basa gran parte de su inspiración en Naruto, por lo que su autor debe estar soñando despierto al ver que uno de sus referentes es un gran admirador de su trabajo.
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