Sugar Crash es el típico juego de aspecto chorra, con un montón de colorines y que a primera vista puede parecer una auténtica porquería.
Pues nada de eso, os recomiendo que os echéis unas partidillas y ya me diréis si pica o no pica. Es una especie de Arkanoid donde se ha sustituido la clásica barra por un terrón de azucar humanizado y la pelotita por un niño que se lo pasa bomba rebotando por todos lados. Eso sí, tendremos que vigilar su estado de salud y dejarlo dormir de vez en cuando para que se recupere o explotará como un globo. Los extras también son los de siempre pero con el particular diseño made in Sugar Crash. Muy divertido.
Vía | Kotaku Sugar Crash