El resumen más pragmático de New Super Mario Bros. U Deluxe no tiene vuelta de hoja: desbloquear niveles, llegar hasta el siguiente banderín, avanzar hasta el último castillo y torcerle los planes a Bowser. Suena sencillo y demasiado familiar. Pero, de ese enorme tramo intermedio entre objetivos emana una extraordinaria diversión que lo convierte en la primera cita obligada de Switch en 2019.
Nintendo amplía la colección deluxe de Switch con uno de los mejores plataformas de su súper estrella, lo cual no es poco. Puedes considerarlo una repesca, una nueva oportunidad o un más que merecido regreso del título que conocimos en Wii U, pero es un clásico que mantiene intacta su magia siete años después. Y pese a que rebosa contenidos, no esperes grandes sorpresas.
New Super Mario Bros. U Deluxe le da al jugador una exquisita sensación de aventuras plataformeras y sabe alimentar constantemente su instinto de exploración, premiandolo con descubrimientos que brotan de lugares imposibles, dentro de los niveles e incluso en el propio mapa.
Una sensación constante de gratificación, planificada con mucho mimo desde luego. Pero también una fuente casi inagotable de desafíos.
Y en medio de ese torbellino de acrobacias, castillos encantados, plataformas deslizantes y alocados Power-Ups -capaces de darle una nueva dimensión a cada nivel- encontramos a Toadette, la novedad estrella de esta edición en forma de nuevo personaje seleccionable. Una heroína que, pese al nombre del juego, reclama y consigue un justo protagonismo en esta edición.
Una apuesta segura, una oportunidad “deluxe”
Si bien Nintendo Switch toma lo más interesante del legado consolero de Nintendo, se podría decir lo mismo de Super Mario Bros. U Deluxe con respecto a su saga plataformera, de modo que veremos lo mejor de las entregas clásicas de NES y SNES y todos los giros interesantes de la serie New Super Mario Bros.
De este modo, pese al exótico y colorido aspecto del Reino Champiñón que iremos descubriendo con cada nuevo nivel superado, Mario y compañía desplegarán con absoluta normalidad movimientos a caballo entre el parkour y el ninjutsu.
Pese al nombre del juego, Toadette, reclama y consigue un justo protagonismo en esta edición.
Pero, una vez más, lo verdaderamente fascinante es el modo en el que Nintendo nos convence de que podemos llegar a sitios imposibles, desviandonos de nuestro objetivo principal: llegar al extremo derecho de la pantalla.
Por delante, un amplio mapeado desde el que tendremos acceso a mundos llenos de plataformas y desafíos para dar y regalar: más de 160 niveles si contamos con que a New Super Mario Bros. U se le suma el DLC New Super Luigi U, lo que significa un extra de dificultad y cómo un ajuste en las físicas de nuestros protagonistas puede darle una nueva dimensión al conjunto.
Así, en ambos juegos -ya que se pueden ver tanto como un conjunto como dos propuestas separadas- deberemos recorrer regiones temáticas que nos llevarán por escenarios alegres y sombríos, atravesando desiertos, playas, bosques, mansiones encantadas, castillos tremendamente retorcidos y toda clase de paisajes colmados de monedas, enemigos y rutas secretas.
Super Luigi U es mucho más desafiante al no tener postes de guardado, y se aumenta la intensidad y la cantidad de peligros. Pero, a cambio, se reduce la duración de sus niveles con un giro extra: el tiempo que tendremos para superarlos será muchísimo menor.
Es fascinante el modo en el que Nintendo nos convence de que podemos llegar a sitios casi imposibles.
Pero claro, luego está su rejugabilidad, la cual es atronadora. Más allá de completar la aventura principal tendremos los coleccionables y los desafíos de la Senda Superestrella, a lo que hay que sumar, cómo no, la diversión de jugar a cuatro personajes. Una experiencia rematadamente divertida de la que hablaremos un poco más abajo.
Hablemos de las novedades, porque las hay
Nintendo ha sido especialmente conservadora a la hora de trasladar New Super Mario Bros. U a Switch, lo que no quita que haya margen para añadir cambios, mejoras y algunas interesantes adiciones a una propuesta ya de por sí redonda. Sin embargo, las novedades estrella tienen nombre propio: Toadette y Caco Gazapo.
A diferencia de la versión de Wii U, en la edición Deluxe podremos alternar entre protagonistas siempre que queramos y mientras no estemos dentro de un nivel. Pero, como en el clásico Super Mario Bros. 2 de la NES, los nuevos héroes disponen de sus propias habilidades. O, más bien, ventajas.
De manera sutil, Nintendo ha añadido a través de la Toadette y Caco dos nuevos niveles de dificultad (fácil y muy fácil respectivamente) sin que eso condicione lo que ocurre en pantalla a lo largo de la aventura. Y lo hace con maestría, ya que lo integra dentro del aspecto multijugador al juego con una sobresaliente naturalidad.
Toadette y Caco cuentan con más tiempo para superar cada nivel que el resto de personajes, así como una movilidad más sólida tanto bajo el agua como sobre superficies resbaladizas. En el caso de Super Luigi U se compensa un poco añadiendo los mayores y más alargados saltos, pero en todo momento queda claro se su presencia aportan nuevos matices al conjunto.
En cuestión de saltos y acrobacias, Toadette no se distancia demasiado del Toad amarillo o los hermanos Mario, aunque cuenta con dos Power-Ups exclusivos: una luna que hace que sume tres vidas extra y la Super Corona, la verdadera gran adición del juego que la transforma en Peachette.
Como Peachette ganaremos una movilidad aérea sin precedentes junto con un gran impulso que podremos activar cuando nos interese. Quizás no tenga la posibilidad de agarrarse a los muros de la Ardilla Voladora, pero es mucho más sencilla -y divertida- de controlar en salto y en tierra. Una jugabilidad que promete interesantes opciones y un reclamo extra para los iniciados.
Jugar con Caco Gazapo no es tan desafiante, pero tampoco garantiza que nos pasemos el juego. Además de atravesar enemigos como si éstos no estuvieran en pantalla, este amigo de lo ajeno recolecta los power-ups y los transforma en vidas al pasar el banderín. Pero deberá esquivar los precipicios y la lava como el resto de héroes de esta aventura.
En New Super Mario Bros. U Deluxe las novedades estrella tienen nombre propio: Toadette y Caco Gazapo.
Con todo, los niveles superados con Caco se quedarán marcados como si hubiéramos usado la Super guía, el modo automático del juego diseñado para que no nos quedemos atascados en un nivel y que regresa en esta edición.
Pero no todas las novedades tiene ojos y patas. La interfaz se ha actualizado para la ocasión y se han incluido todos los extras del juego, incluyendo la sección de vídeos en la que veremos tutoriales y partidas excepcionales, y sumando breve una guía esencial del juego. Pero también se ha añadido un ajuste extra: para hacer el giro en el aire bastará con presionar una vez más el botón de salto. Algo a lo que los que dedicamos ingentes horas a la versión de Wii U deberemos volver a interiorizar.
Sin embargo, una de las novedades más cuidadas de New Super Mario Bros. U Deluxe se puede palpar, en el sentido literal: la vibración HD de los Joy Cons y los mandos Pro brilla con luz propia de modo que cada movimiento, cada golpe, cada superficie y en esencia cualquier cosa que ocurra en pantalla se sienta en nuestras manos, de manera sutil, sí, pero muy acertada.
Un añadido que, quizás queda eclipsado por el verdadero punto estrella del conjunto: su multijugador de sofá.
New Super Mario Bros. U Deluxe no es un party game, pero casi cuenta como uno
Todos los puntos anteriores quedan atados en el auténtico corazón de la experiencia: compartir la partida con otros jugadores. Pese a que las pantallas están repletas de contenidos, el caos y la diversión generada al ver a cuatro personajes exprimiendo sus posibilidades convierten New Super Mario Bros. U Deluxe en una de las experiencias más recomendables del catálogo de una Switch que recoge el testigo de lo mejor y más recordado de la Wii.
De este modo, la adición de Toadette y Caco Gazapo son una invitación abierta a que todo el mundo se una a la partida y que se atrevan a hacer locuras con lo que se encuentran en el escenario. De hecho, en la edición Deluxe cualquier jugador puede ser cualquiera de los héroes disponibles en cualquier momento y es posible aumentar o reducir el número de jugadores cuando queramos.
Tardaremos mucho menos en superar la aventura -si esquivamos los secretos y las rutas alternativas- si jugamos por nuestra cuenta, pero si Super Mario Bros. U Deluxe es una apuesta segura, es en el hecho de repetir niveles sin propósito ni objetivo entre varios jugadores donde los despropósitos y las risas están garantizados.
Sobre todo porque con Toadette, Caco y la opción de usar la burbuja que nos protege in extremis -como en New Super Mario Bros. de Wii- nadie será un lastre a la hora de divertirse.
El caos y la diversión generada a cuatro jugadores es una de las experiencias más recomendables del catálogo de Switch
Desafortunadamente, e incluso con con estos elementos por delante, el multijugador online se queda fuera de la ecuación. Aunque teniendo en cuenta el sistema de comunicación de Nintendo a través de la app de Switch, la ausencia se puede hacer medianamente razonable.
La primera cita obligada en Switch de 2019
Nintendo Switch se ha convertido en un sistema en el que converge lo mejor y lo más destacado de dos generaciones, incluyendo su propio legado. De hecho, que la Gran N rescatara esta joya era cuestión de tiempo. La duda, en todo caso, no era cómo hacerlo sino elegir el momento perfecto, y continuar asentando el juego a cuatro Joy Cons de Super Mario Party y Super Smash Bros. Ultimate es un acierto para todos.
Más allá de ser uno de los juegos de plataformas más sólidos, divertidos y coloridos jamás hechos, Super Mario Bros. U es una aventura en la que que merece la pena descubrir sus secretos y nuevas formas de jugar, así como pelear por cada cada moneda y segundo durante los desafíos.
Pero, ante todo, es un reencuentro con todos los elementos que nos encandilaron de la serie Super Mario Bros. que, a pesar de sus tópicos, siguen mejorando una fórmula sin fecha de caducidad con pequeñas grandes revoluciones.
Llámalo clásico, pero Switch acaba de sumar uno de los plataformas más sólidos, divertidos y coloridos jamás hechos
La adición de Peachette no será el revulsivo que termine de convencer a quienes conservan el juego original, pero cumple de maravilla su función: invitar a que todo el mundo se una a una joya atemporal, que quizás no tiene la ambición de un vendeconsolas del calibre de Mario Odyssey, pero que le sienta igual de bien a una Nintendo Switch que se postula como la protagonista indiscutible de las reuniones entre amigos y familiares.
A favor
- Un plataformas divertidisimo y rebosante de contenidos
- Las partidas a cuatro jugadores son impagables
- Una rejugabilidad enorme diseñada para jugadores de todas las edades
En contra
- Pese a incluir todos los contenidos de Wii U, veremos pocas sorpresas y novedades
- Un multijugador online le hubiera sentado de fábula
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