Wonder Boy III: The Dragon's Trap fue un título inolvidable de la Master System a finales de los ochenta. La obra de Westone, editada por SEGA, acabaría llegando a más sistemas en los noventa, hasta que ya en pleno 2017 recibiría un maravilloso remake a cargo de los franceses Lizardcube y con apoyo de DotEmu.
Monster Boy and the Cursed Kingdom surgió como sucesor espiritual del clásico de 1989, aunque su camino haya sido muy diferente, no en vano se llamó inicialmente Flying Hamster II: Knight of the Golden Seed en 2014. Ahora llega la prueba de fuego con su análisis y lo mejor es ha superado nuestras expectativas, siendo el Wonder Boy con el que siempre habíamos soñado.
De Flying Hamster hasta Wonder Boy
No deja de resultar sorprendente que lo que iba a ser una secuela de ese shoot'em up bastante simplón llamado The Flying Hamster se haya convertido en Monster Boy and the Cursed Kingdom y con el apoyo del mismísimo Ryuichi Nishizawa, creador de Wonder Boy. Del "matamarcianos" conserva pocos elementos, como los pingüinos y otros enemigos, como el jefe Seta.
El que haya mamado cualquier clásico de Mega Drive, Master System o Game Gear, entre otros sistemas de la época, se sentirá como en casa al adentrarse en esta obra de los franceses The Game Atelier fantásticamente localizada al castellano: los mercaderes con sus pociones y distintos objetos para mejorar el equipo, las monedas ocultas por todo el mapeado, ver cómo evoluciona nuestro personaje... Todo huele a los originales, pero bajo un prisma mucho más fresco, arropado por un apartado artístico dibujado a mano exquisito.
Los fondos de los escenarios cuentan con múltiples capas, a cada cuál más detallada, las animaciones de todos y cada uno de los monstruos y animales (incluido el protagonista, Jin) nos brindan momentos la mar de simpáticos... y el juego no puede arrancar mejor con esa introducción a modo de anime y una canción que se nos grabará a fuego. Lo cuál tampoco extraña sabiendo que para la BSO han colaborado maestros de la talla de Yuzo Koshiro y Michiru Yamane, entre otros como Motoi Sakuraba, Keiki Kobayashi y Takeshi Yanagawa.
Monster Boy and the Cursed Kingdom es una carta de amor hacia Wonder Boy y para todos los que crecimos con esa saga legendaria, y se nota, porque todos y cada uno de sus apartados se han cuidado con mucho mimo y a poco que nos metamos en esta aventura será difícil soltar el mando. Pero vayamos por partes.
Monster Boy, el inicio de una aventura mágica
Todo comienza con el humano Jin dentro del reino de Monster World, un lugar apacible, aunque lleno de criaturas de diversa índole, pero nada fuera de lo común. Hasta que un malvado ser nos provoca una maldición que nos convierte en cerdo (guiño, por cierto, al mítico mercader de Wonder Boy), convirtiendo ya de paso a todos sus habitantes en otros animales. Ahí se inicia nuestra carrera para revertir esa situación, no sólo para el propio Jin, sino para la región entera.
El primer cambio a cerdo es curioso, porque nos limita mucho respecto al guerrero Jin y no podremos volver a ser humanos. El proceso durará mucho, más de 15 horas, hasta ver finalizada la aventura. Porque después del cerdo llegará la serpiente, luego la rana, a continuación el león y en última instancia el dragón... Unos seres que nos evocan ligeramente a los del citado clásico de Master System.
Aquí las diferencias entre cada ser están mucho más marcadas y cuentan con más habilitades a sus espaldas, las cuáles iremos desbloqueando poco a poco en forma de talismanes, lo que nos permitirá llegar a zonas antaño inaccesibles, como si de un metroidvania se tratase. Y con muchos secretos por descubrir.
A esto hay que sumarle la posibilidad de ampliar el número de corazones y mejorar ostensiblemente el equipo (tan solo Jin, su estado en rana, león y dragón pueden llevar armas y equipo defensivo), lo que hará que seamos mucho más fuertes que al inicio, donde nos pueden matar de un par de golpes. Porque Monster Boy and the Cursed Kingdom es un plataformas bastante exigente, con ciertos tramos que se harán cuesta arriba, incluso con el equipo mejorado.
Resulta toda una delicia a nivel de diseño y de control, especialmente en lo relativo a esos tramos donde se juntan los puzles. Porque aquí no todo será saltar y atacar: habrá que darle al coco. Puede ir desde lo más sutil eliminando a un enemigo en un punto exacto hasta memorizar distintos patrones para activar una puerta. Hay algunos bastante imaginativos y que requerirán bastante habilidad, sobre todo los que guardan cofres con gemas legendarias en su interior.
Un título que atrapa sin remedio y resulta fresco
No sé cuántas veces habré dicho "Woah, qué chulo" cada vez que avanzaba en este trabajo de The Game Atelier, pero sé que han sido muchas. Monster Boy and the Cursed Kingdom no deja de sorprender a medida que avanzamos, con zonas completamente diferentes entre sí y con retos a la altura que nos harán exprimir al máximo las habilidades de cada transformación. Y aquí hay que hablar de un aspecto que podrá pasar desapercibido para muchos: el menú circular.
Al principio, cuando tan solo me podía transformar en cerdo, serpiente y rana, lo veía como un inconveniente, porque resultaría más inmediato cambiando con los gatillos. Y sí, se puede directamente así, con un cambio en caliente (incluso para las magias del Cerdo y Jin); pero a la larga resulta mucho más práctico el menú.
El único inconveniente que le he visto es ese agarre automático cada vez que saltamos donde hay una escalera o liana, o cualquier elemento que nos haga subir y bajar. Esto me provocó más de un disgusto y extraña que The Game Atelier no ofrezca la posibilidad de desactivarlo. Tal vez con un parche en el futuro...
Por lo demás, es un título que atrapa sin remedio y que empieza a tomar forma a lo grande cuando obtenemos el orbe de la Rana. A partir de ahí es cuando pasa de ser una aventura notable a una sobresaliente. Y lo mejor de todo es que no para de mejorar al descubrir más y más cosas, como que no solamente podemos obtener espadas (hay una vara mágica sumamente útil), que el mapa es mucho más grande de lo que parece, o las ventajas de equiparse con un lote de equipo completamente mejorado (desde ser inmunes al fuego a curarnos andando).
La opinión de VidaExtra
En definitiva, Monster Boy and the Cursed Kingdom honra a lo grande a la saga Wonder Boy. The Game Atelier ha realizado un trabajo magnífico que revitaliza una fórmula con más de 30 años de historia. Todo un sueño hecho realidad para los que crecimos con esta saga de Westone. Indispensable para los fans del género.
A favor
- Toda una carta de amor hacia los Wonder Boy
- Hipnótico a nivel visual
- Duradero y con un porrón de secretos a descubrir
- Lo bien estudiados que están todos sus retos
En contra
- El agarre automático en las escaleras
- Que no salga en físico en España
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