No consigo entender las críticas a ‘Call of Duty: Modern Warfare 3’ por gran parte de la comunidad de jugadores. La innovación no es enorme, y el maremágnum de usuarios agolpados en las tiendas para hacerse con su copia parece peligrosa para aquellos que no casan con la propuesta de Infinity Ward. De ahí se extrae una amenaza. Si vende todo lo que vende y las otras compañías se lanzan a copiar la fórmula para gozar de los mismos ingresos, tarde o temprano el mercado acabará convirtiéndose en una maraña de refritos a la espera de robar cuota al líder.
Sin embargo ese alarmismo por el que todos pasamos en alguna etapa ha demostrado no ser tan negro como lo pintan nuestras cabezas. Hablamos de modas, y todas acaban pasando a mejor vida tarde o temprano, da igual si se llaman ‘Guitar Hero’, Wii, ‘Angry Birds’ o ‘Call of Duty: Modern Warfare 3’. Aquí lo importante pasa a saber reconocer cuándo están empezando a tomarnos el pelo para pasar a otra cosa, y como descubriréis en el siguiente análisis, el último título de la franquicia de Activision, al menos cuando está Infinity Ward a la cabeza, está lejos de llegar a ese punto.
Así que, a sabiendas del pasado, presente y futuro que gira entorno a la saga, disfrutemos mientras podamos. Y si para nosotros ya ha saltado el tiburón no tenemos más que buscar una alternativa que nos satisfaga.
La campaña de ‘Call of Duty: Modern Warfare 3’
Las campañas de ‘Modern Warfare’ siempre han sido cortas. Lo suficientemente cortas para que hayamos llegado a un punto en el que sepamos diferenciar las bondades del producto, que no están en su historia principal, pensando en este controvertido modo como en un tutorial. Uno espectacular, por cierto.
Las caras de asombro durante las presentaciones del E3 hablaban por si solas, tanto en la última edición como en la anterior. Los momentos de acción de factura cinematográfica gustan a gran parte de la comunidad, sobretodo después de que ‘Uncharted’ consiguiese demostrar que la combinación de dichas secuencias y tiroteos puede ser una fórmula perfectamente aplicable a otros géneros.
En ‘Call of Duty: Modern Warfare 3’ han estado cerca de que se les vaya la mano con este tema, y lo demuestra que en cada nivel, aunque sea por una milésima de segundo, algo digno de ver ocurrirá a nuestro alrededor. Sigue siendo tan cerrado como de costumbre, la única medida conocida para que la combinación sea válida, pero los tiroteos consiguen separar lo suficiente los dos tipos de experiencia para que ninguna de las dos se haga repetitiva, confiriendo a la campaña durante sus 4 o 5 horas de duración, un ritmo vertiginoso que te llevará de aquí a allí en cuestión de minutos, sin apenas descanso para darte cuenta de lo que ocurre en la historia.
Si no entendiste nada de lo contado en las dos primeras entregas puedes estar tranquilo. Aquí todo se detalla más, no hay demasiados giros enrevesados y acabas disfrutando del cierre de la trilogía por todo lo alto, con un cierre tan apoteósico como recomendable, sobretodo si sois fans de las aventuras de John McClane.
¿Quién quiere un modo zombis?
Terminada la campaña en una tarde, lo siguiente sería pasar al multijugador online, pero sabemos por experiencia lo mucho que nos va a atrapar ese modo, probablemente el de más peso del juego. Así que antes de ello toca lanzarse a las Operaciones Especiales. Si las disfrutaste en ‘Modern Warfare 2’ con un amigo, ya sea mediante pantalla partida o comunicándote mediante headset, aquí te lo vas a pasar en grande.
Eso sí, sube la dificultad desde el principio, porque será entonces cuando deberás agudizar tu ingenio al máximo y la colaboración pasará a ser irremediable. Superar una pantalla en este modo, ya sea con un traje de Juggernaut, manejando una torreta, o improvisando ataques sigilosos, es todo un reto, pero también una satisfacción enorme.
Probado ese primer trance es imprescindible perder algunas horas de tu valioso tiempo en el modo Supervivencia, una combinación del multijugador con el modo horda de ‘Gears of War’, más concretamente del tercero. Lejos de limitarte a disparar, aquí deberás hacerlo lo más bonito posible, lanzándote al suelo, rodeando los obstáculos e intentando disparar siempre a la cabeza sin que te tosan, para echar a correr después dejando una granada en el suelo y viendo cómo tu multiplicación de puntos alcanza cotas imprevisibles.
Consigue ese hito un par de veces y podrás desplazarte a uno de los tres ordenadores que esconde la zona para comprar armas y accesorios, explosivos con los que preparar el camino y ataques aéreos y apoyos. Soldados, kamikazes , perros, helicópteros y Juggernauts te esperan en la próxima ronda, así que más te vale ahorrar munición y aprovechar al máximo todo lo que compres. Lástima que no puedas juntarte con cuatro amigos para disfrutarlo, porque si en pareja es una gozada, no me imagino lo que podría deparar entonces. ¿Quién quiere ahora un modo zombis teniendo ésto?
La joya de la corona, el multijugador
Mismo motor gráfico, idéntica premisa y hasta texturas, e incluso edificios, repetidos de otras entregas apuntan a enfrentarnos a una mera expansión con nuevos mapas. La mecánica de lanzamiento de los juegos de fútbol trasladada al mundo de los FPS, dicen.
En serio, no lo has jugado si afirmas sin tapujos que la fórmula se limita a eso.
He pasado de contar con una media de 15 muertes de enemigos y 20 bajas en ‘Black Ops’ y ‘Modern Warfare 2’ a literalmente cambiar las tornas por unas 20 muertes y, ojo, 5 bajas. No es que sea más fácil jugar, es que se han conseguido trasladar la evolución de dificultad de un título cualquiera a un modo multijugador online, y eso es un logro lo mires por donde lo mires.
Los nuevos sistemas de rachas de bajas que se suman al clásico, el de apoyo y el de suma de perks, permiten que ahora, veteranos y novatos, gocen de las mismas posibilidades, además del gozo que supone aniquilar a alguien con un helicóptero de ataque. Eso acaba confiriendo a las partidas un ritmo y frenetismo brutal, en el que siempre habrá un UAV en el aire que consiga mostrarte la posición de ese campero que ha pasado a convertirse en tu peor enemigo en cuestión de segundos.
Ten muy clara esa situación. Si te sientas a verlas venir, no dudes que vendrán, así que olvídate de apostarte en una ventana con una claymore en la puerta de entrada porque vas a necesitar cuatro o cinco para cubrir todas las posibles llegadas de enemigos. Sin duda todo ello responde al cuidado que, esta vez sí, se ha puesto en el diseño de los mapas, centrados en hacerte correr continuamente sin apenas descanso para recargar.
Llegado a este punto te das cuenta de que las mejoras están ahí, pero entiendes que pasen desapercibidas a gran parte de jugadores. Sin embargo Infinity Ward, que sabe lo difícil que se le presentaba el asalto con ‘Battlefield 3’ tras la tangana montada con West y Zampella, ha intentado ir más allá, consiguiéndolo con unos cambios de libro que funcionan a las mil maravillas.
Imagínate jugando a un Mario. Después de muchos años ya le tienes cogido el timing a sus saltos, sus enemigos y estrategias, pero imagina que ahora las reglas cambian. Tu salto es más grande, como también su parábola y tiempo de caída, los Goombas pasan a contar con chalecos que les permiten evitar la muerte tras tu primer envite, y lejos de ver a un Lakitu desafiando desde las alturas ahora hay varios de ellos.
Sí, es el mismo juego, pero la forma de enfrentarte a él es ligeramente distinta. Os doy dos ejemplos, un perk y una ventaja. ¿Recuerdas lo mucho que te habría gustado contar con un subfusil con silenciador y fuego graneado acoplados sin tener que deshacerte de la ventaja prestidigitación? Ahora puedes, gracias a un sistema de nivel en las armas que más allá de los accesorios te irá aportando ventajas especiales como disminución del retroceso o el citado acomplamiento doble. Pensabas que sería una buena idea, y lo es, así que aquí la tienes.
Ahora cambiemos el salto que comentábamos de Mario por la velocidad de apuntado de la saga. Una de las ventajas de ‘Call of Duty: Modern Warfare 3’, llamada Cazador, permite que el apuntado se equipare en premura al que tienes cuando vas corriendo, con lo que los giros rápidos en las esquinas o los headshots a dos o tres hombres sean mucho más fáciles de lograr. Llevas varios años jugando de una forma y ahora tienes la posibilidad de ir más allá. ¿Quejas? por supuesto ninguna.
Es muy sencillo, puede gustarte más o menos la saga, su campaña, su multijugador o lo que sea que intenten introducir. También puedes chocar con la política de Activision, con una nueva entrega por año. Una visión de mercado que hasta yo, fan de la franquicia, considero tan perjudicial como caduca. Pero tienes que tener una cosa bien clara, detrás de un lanzamiento como este hay mucha gente, y aún más bocas que alimentar. Disfrutan de este mundo tanto o más que tú, así que limitarte a decir que el juego es una basura es un insulto.
Si está ahí es por una moda, sí, pero algo ha tenido que hacer para llegar a ese podio. A mí me parecerá un juegazo y tu rasero tal vez sea más distinto, Cthulhu me libre de decir que estás equivocado. Pero si con la llegada de PS3 y Xbox 360 soñaste en qué se convertiría una experiencia multijugador cuando la generación llegase a su final, ‘Call of Duty: Modern Warfare 3’ probablemente se acerque a lo que pensaste. No es un juego perfecto, y mucho menos podemos concederle ese título a la saga, pero si te gustan los videojuegos tarde o temprano deberás darle una oportunidad. Será entonces cuando descubras que sus puntos buenos ganan por goleada a los malos.
Call of Duty: Modern Warfare 3 | Xbox 360
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Plataformas: PC, PS3, Xbox 360 (versión analizada)
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Desarrollador: Infinity Ward
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Distribuidor: Activision
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Lanzamiento: Ya disponible
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Precio: 69,95 euros
<p>Call of Duty: Modern Warfare 3 vuelve a triunfar con una campaña corta pero intensa, modos especiales que alargan las horas de juego y un multijugador de idéntico espíritu pero al que la experiencia de la franquicia le sienta mejor que nunca.</p>
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