Podría decir resulta complicado que algo me sorprenda después de jugar al culmen de la acción en 2024. Te hablo de Warhammer 40.000: Space Marine 2... y no me importa lo que digan los The Game Awards 2024. No hay nada tan bestia en este año como la creación de Saber Interactive y Games Workshop. Y aun así, Arrowhead Game Studios me ha sorprendido casi en el tiempo de descuento.
Omens of Tyranny llegó durante la propia gala y trajo consigo la invasión que esperábamos desde hace meses: Los Iluminados, entre otro mucho contenido como las localizaciones urbanas. He pasado todo el fin de semana con mi PS5 encendida y saltando entre Helldivers 2 y Path of Exile 2.
Los combates urbanos siempre son los mejores en videojuegos
Si algo he aprendido como amante incondicional de las películas, series y videojuegos bélicos es que no hay nada como un combate urbano. No importa si es en las guerra mundiales, modernas e incluso en aquellas de ciencia ficción. Y más cuando hay mucha destrucción de por medio. Battlefield 3 con Gran Bazar y Cruce del Sena y The Finals son la meca de la destrucción en estos entornos.
Ahora imagina juntar los entornos urbanos con Helldivers 2, que se ha convertido en el juego de peregrinación obligatoria para todos los jugadores que aman los espectáculos pirotécnicos y que no tienen escrúpulos a la hora de contribuir a la xenofobia intergaláctica. Pues el resultado es exactamente tan épico y brutal como imaginas.
He pasado todo el fin de semana luchando con los Iluminados en las colonias de SuperTierra del planeta Calypso. Pero no en los alrededores o cerca de las murallas, sino en las propias calles... y sin ninguna restricción que me impidiese tirar una bomba de 500KG junto a dos edificios de casas civiles. No sé si quedaban supervivientes, pero lo cierto es que tampoco me lo planteé hasta bien entrado el conflicto.
Los combates urbanos de Helldivers 2 son uno de los espectáculos más locos y brutales que he jugado en 2024 junto a Warhammer 40.000: Space Marine 2. Se puede destruir absolutamente todo, desde los edificios hasta el mismísimo suelo. Las calles están llenas de zombies y otras tropas iluminadas, y no se piensan dos veces dispararte.
Las colonias eran su base de operaciones tras la invasión y en la mayoría de casos ocupaban buena parte de los mapeados de las misiones. En dificultades bajas y medias eran prácticamente todo el mapa, mientras que en las más difíciles se incluyen muchas zonas exteriores e incluso varias urbanizaciones separadas. Y cada calle era el escenario de un tiroteo. Resultaba fácil que todas las tropas enemigas de la colonia acabasen juntas en una misma intersección.
He visto colonias convertidas en verdaderos patatales después del paso de los helldivers. Recuerdo una partida que no dejamos ni un solo edificio en pie porque nos pusimos de acuerdo para tirar cuatro Bombardeos Orbitales de 380 mm y Láseres Orbitales desde cada extremo de la colonia. El espectáculo fue tan glorioso que se resintieron hasta los fps en PS5. Quedaron un par de edificios en pie que no tardaron en caer mientras rematábamos a los supervivientes.
Es cierto que Helldivers 2 no tiene los mismos niveles de destrucción que Battlefield y The Finals. No es tan detallado. Las explosiones y el humo enmascaran cómo los edificios se vienen abajo rápidamente y los escombros forman piras similares. Aun así, luce espectacular y cumple a la perfección sin reventar la experiencia de juego. No sé cómo el juego puede soportar tantos enemigos (he llegado a ver +50 en pantalla de todos los tamaños), naves cayendo del cielo y el nivel de destrucción con bombardeos al que estamos acostumbrados.
Aunque podría añadir comillas a "puede soportar", porque obviamente Helldivers 2 ha tenido problemas este fin de semana debido a la abrupta crecida de jugadores y que faltan algunas mejoras de optimización menores en los combates urbanos. Y fue precisamente gracias a uno de estos errores que viví la partida más épica de todas.
Estaba pidiendo la extracción sobre una estructura de hormigón en mitad de la colonia. Ocurrió algo en la partida que provocó que mis tres compañeros se desconectasen al mismo tiempo y a mí me expulsó de la pantalla justo al acabar de introducir la secuencia para solicitar la nave. Estaba completa, pero el mensaje no se envió. Lo intenté de nuevo, pero obviamente estaba bugueado.
Pensé en abandonar la partida para "no perder el tiempo". Hubiese sido lo más normal... pero no soy así. No solo me quedé, sino que me monté una historia: la baliza de extracción era defectuosa y debía esperar los 20 minutos restantes de partida para que viniese la nave desde mi destructor de forma automática. Y fue la mejor decisión que pude tomar.
El juego detectó que había pedido la extracción, así que los enemigos no cesaban de venir a impedirla. Oleadas de 15-20 zombies, tropas terrestres y voladoras de los Iluminados, naves con refuerzos y un par de titanes. Aguanté todos los embistes desde aquella posición elevada en el centro de la colonia. Utilizaba la ametralladora y el icónico rifle Constitución para el combate cuerpo a cuerpo y diezmaba a los grupos desde lejos con las bombas de 500KG y el bombardeo de 380mm... mientras los tuve. Y no es por dármelas de machote, pero solo morí una vez... por caída.
He disfrutado Omens of Tyranny como un completo demente. Nunca había gozado tanto Helldivers 2 fuera del frente Termínido. Lo único malo de todo esto es que los helldivers hemos pegado tal paliza a los Iluminados que los hemos expulsado antes de que les diese tiempo a desembarcar, como los atenienses contra los persas en la película 300: El Origen del Imperio. Aunque seguro que volverán. Y lo estoy deseando porque los combates urbanos han sido demencialmente épicos y brutales. ¡Qué gran momento para ser fan de esta maravilla!
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