No hay nada mejor que un buen café por la mañana, pero ese es un lujo que en pleno apocalipsis es prácticamente imposible de conseguir. Lo podíamos comprobar en The Last of Us de Naughty Dog y ahora ha sucedido lo mismo en la adaptación realizada por HBO.
Atención spoilers: a partir de este momento se tratará la trama del cuarto episodio sin tapujos.
Tras dormir al raso en mitad del bosque, Ellie despierta por la mañana y se encuentra con una cafetera junto a ella hirviendo. Joel está preparando un café que no parece demasiado apetecible y la joven lo confirma al abrir la tapa y oler el contenido. Tras rechazar un poco de semejante brebaje, ambos reanudan la marcha en la camioneta.
Joel no tiene dudas en volver a tomarse el café en el termo, a lo que Ellie pregunta si "¿Eso era lo que vendían en los Starbucks de la zona de cuarentena?". Joel responde que aquel era más fresco que el han recogido de casa de Bill, por lo que Ellie dictamina que "huele a mierda quemada". Evidentemente, conseguir café en buen estado tras 20 años es casi imposible, pero el protagonista se resiste a abandonar ese placer.
Aunque no lo parezca, se trata de una sutil referencia a los videojuegos. Durante nuestra visita a Pittshburg, podemos activar una conversación opcional con Joel en el hotel inundado donde se encuentran los saqueadores. A partir del 1:06:33 de este vídeo podéis ver cómo Joel añora el dulce néctar del café.
Son muchas las referencias que encontramos en los episodios de The Last of Us para HBO. Uno de ellos tiene que ver con los poco divertidos chistes de Ellie o la música que podemos escuchar cuando viajan en la camioneta los dos protagonistas. Sin embargo, el verdadero terror se esconde debajo del suelo agrietado que podemos ver en una secuencia.
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