El fracaso de Battlefield 2042 ha sido más que evidente. DICE no acertó con la tecla y Electronic Arts ha dejado casi a la deriva un proyecto que ampliaba más que nunca la cantidad de jugadores en el campo de batalla. Sin embargo, ello no nos impide volver a sumergirnos en el último gran título que ha visto la luz en la franquicia.
Y es que Battlefield 1 sigue siendo una obra colosal que representa mejor que nunca la Primera Guerra Mundial. Lanzado en 2016, el brutal realismo que aporta el juego es difícilmente replicable, simulando perfectamente que estamos en mitad de una escaramuza en África o en pleno corazón de Europa. Lo mejor es que lo tenemos a tiro en Xbox Game Pass para Xbox One, Xbox Series X/S y PC, además de que está disponible para Xbox Cloud Gaming si somos suscriptores Ultimate.
El pack que puedes encontrar en el servicio de Microsoft es el Revolution, el cual incluye las expansiones They Shall Not Pass, In the Name of the Tsar, Turning Tides y Apocalypse. Las batallas se pueden librar tanto por tierra, mar y aire, con vehículos de la época que se pueden pilotar con varios jugadores a la vez. Y es que una de las claves del juego es poder contar con equipos de hasta 64 soldados.
Explosiones, balas silbando cerca de tu cabeza y luchas encarnizadas en escenarios que se destruyen completamente. Esa la tónica habitual mientras decides en qué localización aparecer en los diferentes modos de juego multijugador, al igual que en la campaña. A su vez, múltiples clases están disponibles para que te puedas adaptar de la mejor forma y ayudar a tu escuadrón.
Por otro lado, los packs del Barón Rojo, de Lawrence de Arabia y Hellfighter, incluyen armas, vehículos y emblemas especiales, inspirados en los famosos héroes y unidades.
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