Nintendo cometió un error de marca con Wii. Tal vez os suene a barbaridad esta frase viendo las abrumadoras cifras de ventas de la consola, cifras que le han dado a esa cajita blanca, contra todo pronóstico, la mitad del mercado de sobremesa actual, pero es que no estoy hablando de eso, de hecho, son conceptos que pueden convivir.
Fijaos en los nombres de las máquinas anteriores de la compañía: NES (Nintendo Entertainment Sistem), Super Nintendo, Nintendo 64 y Nintendo Gamecube siempre han llevado asociado el nombre de la empresa. Ese detalle creaba afiliación, comunidad, seguidores de una generación a otra. Wii ha conseguido meterse en millones de hogares donde nunca antes hubo una consola. ¿Cuál es el problema? Que la mayoría de nuevos usuarios no relaciona esa adquisición con Nintendo.
Haced la prueba, perded unas horas en fechas festivas en un centro comercial. Os quedaréis alucinados con frases como esta por parte de la mayoría de los clientes que busquen una consola o un videojuego: ‘¿Cuanto vale una Wii, y una Nintendo? ¿Dónde están los juegos de la Nintendo? No, los de la Wii no, los de la Nintendo’. Lo habéis adivinado, el usuario novel, el padre, la abuela, tienen en mente que Nintendo es igual a DS, DSi, DSi XL o 3DS y que Wii es… otra cosa.
En pocos minutos la conferencia de Nintendo dará comienzo en el E3 2011. Entonces será revelado el nombre oficial de lo que conocemos ahora mismo como Proyecto Café. Desestimando que ese nombre sea Wii 2 o Wii HD (conceptos que no harían justicia a la supuesta evolución que quiere representar el nuevo invento) la compañía de Kioto tendrá que hacer un esfuerzo adicional para que los millones de jugadores noveles surgidos al amparo de Wii sigan asociando ambas máquinas, sigan siendo clientes potenciales.
Tal vez es lógico que Wii se presentara en su momento como algo nuevo sin pasado a causa de los resultados a la baja de Nintendo 64 y Gamecube. Un caso claro en ese sentido lo tenemos con SEGA, que disoció su marca de Dreamcast a para que la mala fama cosechada en años anteriores (Mega CD, Megadrive 32X) no perjudicara el camino a aquella estupenda máquina. ¿Cuál fue el problema con SEGA? Que por entonces quien compraba videojuegos era el jugador habitual, por lo que fue imposible engañarlo con esa artimaña. Sí, Dreamcast pagó injustamente los pecados pasados.
Si Wii y Proyect Cafe tuvieran un nexo, Nintendo ahorraría millones en publicidad. La mitad del trabajo estaría hecho. Tal vez vean la hora de rectificar y se vuelva a asociar videojuegos con Nintendo como ocurrió a finales de los 80 y principios de los 90. El problema en esta ocasión es que el público potencial posiblemente sólo tenga en casa la Wii, tal vez una Nintendo DS o una PSP para los niños. ¿Cómo vuelves a captar la atención de esos millones de compradores? Cómo les dices, ‘somos los mismos de antes, vuelve a confiar en nosotros’. Tal vez gracias a un fontanero bigotudo que ya es como de la familia.
¿Nintendo rescatará su propio nombre como marca? ¿Sería eso una nueva señal a los jugadores de toda la vida? Pero si es así ¿Cómo mantienes entonces a los recién llegados? ¿Bastaría con tirar de mascotas y personajes célebres? Saldremos de dudas en breve, mientras, me voy a preparar un café.
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