El hecho de subirme en una moto me da cierto respeto, así que hacer cualquier tipo de locura con una es algo que en principio no se me pasa por la cabeza. Por suerte hay videojuegos como Trials Rising que sí me permiten realizar todo eso sin poner en riesgo mi vida y al mismo tiempo me otorgan una gran diversión al hacer el cabra con acelerones y saltos kilométricos.
Cualquier jugador de PS4 y PS5 que esté suscrito a PlayStation Plus Extra y Premium lo puede comprobar también gracias a que la entrega más reciente de la saga de RedLynx está gratuitamente en PlayStation Store. Ideal para los que queráis afrontar un buen desafío, porque sus más de cien niveles requerirán una buena habilidad a los mandos por vuestra parte.
En cada una de estas fases os tocará examinar y comprender bien cómo son a la hora de darle caña a vuestra moto para así atravesarlas sin pegaros un buen leñazo. Eso mismo lo pondréis en práctica en los escenarios que iréis desbloqueando poco a poco y en los que visitaréis decenas de ciudades de lo más icónicas, como por ejemplo la Torre Eiffel de París, las pirámides de Egipto o también la Tomatina de Buñol.
Por el camino os encontraréis con varios niveles de dificultad y numerosos obstáculos en forma de trampas o explosivos que os pondrán las cosas más complicadas. No obstante, existe el modo Universidad Trials para aprender todos los conceptos básicos a lo largo de una docena de lecciones, algo que sin duda viene de maravilla para dominar las técnicas más esenciales para que no se os resista ninguna fase.
En cambio, a los que busquen una experiencia para compartir con otras personas les agradará saber que hay unos cuantos modos multijugador. Por ejemplo, está la Moto Tándem que la conducen dos personas, el Modo Fiesta para que se junten cuatro personas en una misma pantalla y tampoco falta el multijugador online con una capacidad para ocho pilotos para que cada uno demuestre su destreza en unas carreras con una acción muy desenfrenada.
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