La genuina esencia del terror psicológico vuelve a hacerse videojuego. El remake de Silent Hill 2 se pone a la altura del original y, en el proceso, le gana la partida en apartados clave al arroparse con el poderío del Unreal Engine 5 y la tecnología de PS5 y PC. Siendo todo aquello que convirtió el clásico de Konami en una obra de merecido culto, pero también la suma de todas y cada una de las lecciones aprendidas durante años por el Bloober Team. El resultado: esto ya no es un juego, sino una experiencia. Una que poco a poco te cala hasta los huesos.
El regreso a la pesadilla y la debacle emocional de James Sunderland es el sueño cumplido de los enamorados del terror a través de los videojuegos. Un viaje sin retorno en el que eres plenamente consciente de que cada paso que das guiado por un finísimo hilo de esperanza te mete más y más en la boca del lobo. Pasando gradualmente de la incertidumbre al pasear en soledad y casi sin rumbo a la tensión implícita y, de ahí, a la absoluta desesperación. Es más, ya te adelanto que jamás había sentido tanta angustia al jugar sosteniendo el mando DualSense.
El pueblo maldito de Konami reabre sus puertas en los sistemas actuales y eso hoy vuelve a ser sinónimo de Terror Psicológico en mayúsculas. El peso y la responsabilidad de lograr impresionar tanto a quienes "sufrimos" el original como a quienes llegan de nuevas recae en un Bloober Team que, descaradamente inspirados por la saga Silent Hill en general y más específicamente por esta secuela que hoy rehacen, se han labrado su nombre propio dentro del panorama del Terror Psicológico en los videojuegos. Siendo a todos los efectos una oportunidad de ensueño que los polacos han sabido aprovechar. Para alegría de todos.
Porque el Silent Hill 2 original fue el cenit de la saga. Eso es incuestionable. Pero eso no quita que, por muy adelantado que estuviese a su propia época, también se trate de un juego lanzado en 2001. Y pese a que, a priori, podría parecer que rescatarlo y darle una merecida puesta al día es poco más que una apuesta sobre seguro, la otra realidad es que es a día de hoy es imposible ofrecer las mismas sensaciones ofreciendo simplemente lo mismo con un apartado visual mejorado. Entre otras cosas, porque Konami creó escuela y aquello que hace dos décadas fue innovador hoy es parte sustancial del lenguaje de los videojuegos de terror y sus clichés.
Ante ese desafío, Bloober Team acierta al emplear el Unreal Engine 5 y saca todo el partido y posibilidades de la tecnología de los sistemas actuales para atreverse a hacer algo más que una restauración superficial del clásico de Konami: el remake de Silent Hill 2 se apoya férreamente en atacar las emociones y promover la incertidumbre del jugador para, poco a poco, llevarlo a su terreno. Siendo exquisitamente reverencial con aquello que recordábamos mientras se vuelve a promover un tipo de terror que, bien proyectado, es capaz de eclipsar a todos los demás: el miedo a lo desconocido.
Como resultado, de manera escalonada el remake de Silent Hill 2 se desprende de todos los prejuicios derivados e implícitos de ser la enésima puesta al día de un juego de renombre en lo que llevamos de generación para aspirar a convertirse en una de las mejores experiencias de terror en clave de videojuego en lo que llevamos de década. ¿La gran diferencia entre una cosa y otra? Preservar la excelencia del original. De modo que en lugar de autolimitarse a los hitos logrados en su día, Bloober Team y Konami destrozan el efecto de retrorotura para que el mejor Silent Hill reviva y despierte esas sensaciones que toda una generación atesoramos en nuestro recuerdo. O en los traumas de cada uno.
Índice de Contenidos (6)
- El pueblo de Silent Hill da más miedo del que recordabas. Y cuando oscurece ni te cuento
- Un remake que quiere estar a la vanguardia sin descarrilarse de la esencia del clásico
- Silent Hill 2, una lección magistral de cómo lograr una inmersión intachable
- La opinión de VidaExtra
- Precio de Silent Hill 2 (2024)
- Duración de Silent Hill 2 (2024)
El pueblo de Silent Hill da más miedo del que recordabas. Y cuando oscurece ni te cuento
No es la primera vez que James Sunderland pisa el pueblo Silent Hill, pero todo ha cambiado desde la última vez que estuvo. No solo las calles, grises desoladas e inmersas en una niebla tan densa que casi se podría cortar con un cuchillo; sino también todo en lo que respecta a su propia vida. ¿Qué se nos ha perdido ahí? Hace no demasiado James recibió una carta firmada por su mujer pidiéndole que la fuese a buscar a aquel lugar apartado de la mano de Dios. Lo verdaderamente preocupante es que, desde el principio, se nos dice que ésta murió hace tres años.
Nuestro protagonista no ha logrado superar la pérdida de su esposa Mary, pero también es plenamente consciente de que aquellas misteriosas palabras esconden algo más. De modo que, tras aclararse las ideas y autoconvencerse de que todavía no se le ha ido del todo la cabeza, decide regresar para afrontar la verdad. Sea cual sea.
Lo que podría haber sido un simple viaje a una localidad remota motivado por la incertidumbre acabará tornándose en una pesadilla: tras las densas capas de niebla que cubrían lo que parecía un pueblo fantasma se esconden criaturas sacadas del mismísimo infierno. Y al cubrirse el cielo la cosa se pone todavía peor. Algunas de estas monstruosidades se arrastran por el suelo, otras esperan el momento preciso para asaltarle y otras se dejarán de sutilezas y tratarán de partirnos por la mitad de un mandoble. ¿Qué puede hacer un tipo normal en una situación así?
No obstante, lo que James encontrará en el camino no solo serán seres que atentan contra su vida, criaturas de la noche y otras personas que también deambulan por Silent Hill atormentadas, sino un camino sin redención posible que gradualmente le consume, conduciéndole hacia el sufrimiento, la angustia y, poco a poco, le harán aflorar emociones completamente irracionales. ¿qué pinta Mery en todo esto y qué significa la carta que guarda con recelo en el bolsillo? Quizás, si sobrevive, logre encontrar la verdad. Con suerte, incluso hasta será capaz de procesarla.
La trama de Silent Hill 2 parte de premisas aparentemente sencillas que parecen delegar su peso en la ambientación y el componente de misterio. Sin embargo, conforme más avanzamos y más nos perdemos en las calles y edificios de ese pueblo maldito, más se retuerce el viaje emocional de James. Un tipo completamente vulnerable a niveles emocionales, pero absolutamente decidido a descubrir qué es lo que está pasando en ese pueblo.
¿Un héroe? No exactamente. De hecho, James ni siquiera es bueno defendiéndose como gato panza arriba de los monstruos que le asaltan. Por eso nosotros, como jugadores, nos ponemos directamente en lo peor cada vez que uno de éstos asoma.
Al igual que el clásico de 2001, el remake de Silent Hill 2 apuesta por el minimalismo absoluto de cara a una interfaz completamente limpia y que -¡gracias a Dios!- declina el uso de recursos modernos como brújulas en pantalla o indicarnos en una esquinita de la pantalla qué tenemos que hacer o a dónde ir para fomentar que sea el jugador el que resuelva este viaje colmado de sobresaltos, tensión y verdadera angustia.
Ojo, esto no quiere decir que en el remake de Silent Hill 2 no se apueste por ofrecer facilidades razonables y abrirse a nuevos jugadores: además de habilitar la opción de elegir entre gráficos y rendimiento (olvídate del primero) tenemos infinitas opciones de personalizar la experiencia con filtros, ajustes de control, un impresionante catálogo de ayudas para la accesibilidad. Y, ya puestos, preguntándonos antes de empezar cada nueva partida como de difíciles -y crueles- queremos que sean los combates, los puzles y la experiencia.
Apegándose magistralmente a las sensaciones originales, pero también adaptándose magistralmente a los tiempos y jugadores contemporáneos tanto en lo visual como en lo jugable.
Un remake que quiere estar a la vanguardia sin descarrilarse de la esencia del clásico
Que Silent Hill 2 haya sido reconstruido en Unreal Engine 5 no es sinónimo de ofrecer una clase de despliegue visual atronador. Entre otras cosas, porque el tipo de juego que es no lo requiere. En lugar de eso, Bloober Team aprovecha estas herramientas para lucirse menos en acabados épicos y animaciones pretenciosas y volcar ese mismo esfuerzo en el auténtico motor de la narrativa: la ambientación. Algo que no solo se consigue simplemente con lo logrado en pantalla, que no es poco, y que propicia una inmersión total en la atmósfera y el tono que exige este tipo de experiencia.
Las calles del remake de Silent Hill 2 y los pasillos de sus edificios siempre emanan un tipo especial de tensión, incluso cuando parece que estamos solos. En exteriores la niebla ayuda a generar esta sensación, pese a que en el proceso difumina buena parte de los acabados; mientras que al sumergirnos en los mundos de pesadilla es casi posible sentir las amenazas que nos acechan y prácticamente respirar el ambiente viciado, el cual en muchas ocasiones apenas se puede llegar a mostrar con la tímida lamparita que nos encontramos pasados los compases iniciales del juego. Y eso nos lleva directos a uno de los primeros grandes cambios de la propuesta: ahora veremos a James desde la espalda.
Bloober Team declina el uso de cámaras prefijadas o el sistema de control original en el remake de Silent Hill 2 para apostar por la vista desde el hombro en tercera persona, y pese a que a priori genera dudas, el resultado funciona de maravilla: con esto se logra darle un impulso adicional a una jugabilidad que jamás fue el apartado estrella de la saga y, en el proceso, darle mucho más peso tanto a la ambientación como a la inmersión. Por no hablar del hecho de que así no malgastaremos la escasísima munición que se nos da.
Siendo justos, la jugabilidad, aunque no ha sido el plato fuerte de Silent Hill 2, y tampoco lo es en su remake. James no se mueve y desenvuelve como el típico protagonista de un videojuego y conviene recordar que, pese a que daremos porrazos con una tubería y tendremos acceso a pistolas y escopetas, esto jamás ha sido un juego de acción y mucho menos de infiltración, sino que todo gira en torno a la indefensión propia del terror psicológico. Lo cual, siendo justos, no está reñido con ofrecer un sistema de apuntado menos frustrante.
Silent Hill 2, una lección magistral de cómo lograr una inmersión intachable
Con esos términos claros, a partir de este punto el remake de Silent Hill 2 se vuelca por completo en darle uso a todas las posibilidades de los sistemas de vanguardia: el sonido envolvente adquiere una importancia trascendental dentro de la experiencia (jugar con auriculares es un salto de calidad comparable a emplear conexiones HDMI) y en el caso de PS5 ya te adelanto que el juego de Konami es uno de los máximos evangelizadores del mando DualSense:
- De entrada, a través de su altavoz se emiten los ruidos de la radio cuando se aproximan amenazas, de modo que es uno de los mejores recursos para sumergirte en la experiencia.
- Además, es uno de los títulos que más y mejor uso hacen de la tecnología háptica. tanto al resolver puzles como al transmitir los nervios y tensión de James a las manos del jugador. Y ojo, que eso también se refleja en el led.
- Pero es que lo mejor llega cuando al enfrentarte a monstruos a golpes o porrazos sientes el impacto del tubo o el tablón de pinchos. Sobre todo, cuando una vez derribados insistes para rematarlos a la desesperada tras un susto inesperado cual cucaracha traicionera.
El empleo del DualSense añade enormes matices a un juego que declina la acción fluidez de manera intencionada, pero no es el único recurso de PlayStation que se pone a nuestra disposición: si vienes de nuevas las tarjetas de guías serán tu salvación dándote pistas o haciéndote un cálculo aproximado de cuánto te queda hasta el próximo tramo del juego. Algo muy importante, dado que aquí hay zonas de guardado.
Entonces, ¿todas las novedades del remake son jugables y visuales? Definitivamente no. Bloober Team ha expandido zonas enteras, ha añadido y enriquecido la historia con nuevos matices que se disfrutan todavía más cuando ya has jugado y sin descarrilarse de las temáticas y la obra original. Y, en el proceso, se ha reservado sorpresas con las que meterse en el bolsillo a los que vienen del clásico de 2001. Todo ello sin perder la perspectiva: Silent Hill 2 no solo regresa para los nostálgicos, sino también para todos aquellos que jamás habían puesto los pies en el pueblo maldito.
Te puedo decir, sin detalles, que hay al menos un final que no estaba en el clásico. Y también te adelanto que, como los juegos de hace dos y tres décadas, el remake de Silent Hill 2 se ha diseñado y se presta de maravilla a la rejugabilidad. Revalidando y dándole más valor a todos los hitos originales para ofrecer mucho más que una puesta al día: recordarnos por qué Silent Hill es el legítimo rey del terror psicológico y su secuela el culmen de toda la franquicia.
La opinión de VidaExtra
El remake de Silent Hill 2 es mucho más que uno de los mejores exponentes del terror en la actualidad, sino también un ejemplo de cómo empapar al jugador en la experiencia de un videojuego y su atmósfera. Visualmente ya te adelanto no juega en la misma liga que otros títulos que están a la vanguardia, pero no lo necesita para que sientas verdadera angustia y una tensión constante. Tanto cuando toca salir al paso entre monstruos, como al deambular en solitario en entornos infernales y, en ultima instancia afrontar de manera definitiva un mal que, como jugadores, poco a poco nos consume desde dentro hacia afuera.
Silent Hill 2 no es un juego para los que buscan un Survival Horror que transcurre entre tiroteos y sustitos, o esa clase de entretenimiento nacido en los videoclubs de hace tres o cuatro décadas capitaneado por el cine de George A. Romero o Wes Craven, sino un tipo de experiencia más sobrecogedora que abruma y, a la vez, atrapa al jugador. Algo que gana enormes matices a través de un remake en el que Bloober Team se luce mientras reconstruye esa obra que tanto les ha influido aplicando aquellas lecciones aprendidas en la saga Layers of Fear o The Medium. Títulos que, a la vez, son hijos de la saga de Konami.
Desde ya te confirmo que el James Sunderland con el que jugaremos en los sistemas de 2024 no luchará con las tuberías como Sifu, y mucho menos se defenderá abriéndose paso con las maniobras militares y la puntería de Leon Kennedy de Resident Evil 4. Las aspiraciones de Silent Hill, como saga, siempre fueron explorar la angustia desde la indefensión y el miedo a través de la incertidumbre desde su primera entrega. Elementos que, a todos los efectos, brillan con nueva luz en el remake de Silent Hill 2.
Precio de Silent Hill 2 (2024)
El precio del remake de Silent Hill 2 es de 69,99 euros tanto en PS5 como en PC a través de Steam. En el caso de las consolas de Sony, Konami ha lanzado ediciones en físico y puedes encontrarlas por algo menos de su precio de venta recomendado sin tener que buscar demasiado. En cualquier caso, te interesará saber que solo las reservas de las ediciones digitales del juego incluyen una o más máscaras para vestir a James, las cuales le podremos colocar incluso al empezar nuestra primera partida.
Silent Hill 2 - PS5
Por otro lado, además de las ediciones estándar Konami también ofrece las ediciones Deluxe del remake de Silent Hill 2 por 79,99 euros. Estas son únicamente en formato digital, tanto en PS5 como en Steam, y añaden al contenido del juego al menos una máscara adicional para James así como el paquete de Extras, el cual se instala por separado al juego en consolas y consta de un libro de arte digital realmente interesante (incluyendo spoilers para quien no ha jugado) y, por otro lado, 12 piezas musicales de Akira Yamaoka.
Por último, aunque no menos interesante, las reservas de las ediciones Deluxe del remake de Silent Hill 2 (exclusivamente en formato digital) habilitan poder adentrarse en el pueblo y jugar 48 horas antes del propio lanzamiento del juego. Tiempo más que suficiente para llegar al final de la historia por primera vez y de manera holgada. Si le echamos valor, claro.
Duración de Silent Hill 2 (2024)
Puedes completar por primera vez el remake de Silent Hill en algo menos de 20 horas. Según mis registros, tardé más de 18 horas con el apunte adicional de haber exterminado a la mayoría de criaturas de pesadilla que me salieron al paso en lugar de pasar de largo más el empeño por registrar cada cajón y rincón habilitado de los mapas. Con todo, y sin entrar en detalles, ya te adelanto que hay diferentes finales en base a tu desempeño en el juego, incluyendo nuevos, de modo que la rejugabilidad eleva el valor del conjunto.
Silent Hill 2 (2024)
Plataformas | PS5 (versión analizada) y PC |
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Multijugador | No |
Desarrollador | Bloober Team |
Compañía | Konami |
Lanzamiento | 8 de octubre de 2024 |
Lo mejor
- Puro terror psicológico: adentrarte en el pueblo maldito de Silent Hill será tu pesadilla favorita
- Un remake soberbio que mantiene la esencia del original y enriquece en todos sus aspectos
- Bloober Team saca partido de la tecnología de PS5 para la inmersión definitiva
Lo peor
- Los combates jamás fueron el punto fuerte del clásico, y tampoco lo son en su remake
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