Uno de los videojuegos que me marcó la infancia fue Super R-Type, uno de los primeros shoot'em up que llegué a jugar junto con Parodius, Darius Twin y alguno más que me hicieron pasar unos años entre lluvias de disparos, aunque son también títulos que te ayudan a ganar reflejos al tener que esquivar a tantísimo enemigo y obstáculos que hay por el terreno. Todo ello logró que se convirtiese en un género que siempre me ha llamado la atención, aun siendo consciente de que son propuestas que pueden hacértelo pasar realmente mal.
Eso mismo es algo que he vuelto a revivir recientemente con Cygni: All Guns Blazing, el primer trabajo del estudio escocés KeelWorks que ya tuve la ocasión de probar hasta en dos ocasiones con versiones preliminares que me brindaron una sensación bastante positiva del juego que se avecinaba. No obstante, ahora que he tenido acceso a su versión final, me he dado cuenta de que quizás que no está enfocado para cualquier persona.
Unas impactantes batallas cinematográficas
La historia de Cygni se podría resumir muy rápidamente al decir que un ejército alienígena ha invadido el mundo en el que vive la humanidad, así que no les queda otra opción que llamar a las filas a sus mejores pilotos para que se suban a sus naves y lo den el todo por el todo para aniquilar a millares de naves enemigas. Se podría decir que eso es todo, porque la importancia que se le da a la trama es prácticamente nula.
Esta transcurre en una serie de cinemáticas que aparecen mayoritariamente al finalizar cada una de las siete fases en las que se divide esta aventura de acción. Es más, la primera se ellas es realmente impresionante por cómo lucen sus personajes y todas las animaciones, aunque a partir de ahí el nivel de estas escenas sufre altibajos porque pasa a dejarnos con imágenes estáticas, otras con stop-motion y también están las que parecen totalmente reales, así que resulta un tanto extraño que no se haya seguido un mismo ejemplo para todas.
Eso no quiere decir necesariamente que sean malas, ni mucho menos, porque las disfrutas perfectamente para descansar y desconectar de tanto tiro mientras que la protagonista cuenta cómo está avanzando el enfrentamiento contra este temible ejército extraterrestre. El problema de ellas es que al final tampoco sirven para mucho más, porque la trama está profundamente relegada a un segundo plano, con unas voces en inglés y subtítulos en castellano.
De todos modos, lo que realmente importa es la jugabilidad y ahí es donde Cygni cumple perfectamente con su cometido, porque nos deja con unos niveles de scroll vertical en los que nuestra nave lanza constantemente una brutal ráfaga de disparos para volar en mil pedazos a cualquier nave contraria que esté al alcance. Esto mismo transcurre con una calidad alucinante, porque si hay algo que es innegable es que la calidad gráfica del juego es sobresaliente.
Todos los escenarios, con ese toque oscuro para no dejar dudas de que estás en medio de una guerra muy despiadada, lucen de escándalo. Ya no solo es que el rendimiento no caiga jamás de los 60 fps, es que por la pantalla no paran de desfilar infinidad de explosiones, nubes de humo que se forman a causa de estas, rayos láseres y otra serie de efectos que se convierten en toda una delicia para la vista. En resumen, se podría considerar como una experiencia cinematográfica tremendamente fascinante.
Lo mismo se aplica para los enemigos, con distintos tipos de naves alienígenas que no pararán de surgir por todas partes dispuestas a destruirnos sin contemplaciones, así que hay que devolverles la misma moneda sin cesar, pero lo suyo es estar bien preparado y calentar las manos antes de pasar a la acción, dado que todas y cada una de las fases cuentan con una duración estimada de entre 10 y 15 minutos en las que los momentos de respiro prácticamente brillan por su ausencia.
Y todo ello mientras no paras de esquivar cientos de balas y rayos, naves enemigas que se desplazan en plan kamikaze y hasta elementos que haya por el escenario. Todo ello requiere un nivel de concentración un tanto elevado y unos reflejos de acero para sobrevivir, pero también se agradece que la jugabilidad sea tan grandiosa, vistosa y entretenida para que el rato que pasas a los mandos sea simplemente espléndido, a lo que se une también una banda sonora que acompaña a la perfección a las diferentes pantallas que logran atraparte al instante.
Metido de lleno en un cielo infernal de los que causa pesadillas
El hecho de haber destacado varias veces lo de tener unos reflejos de acero, el que haya tanto enemigo y especialmente la duración de las fases se debe a que la dificultad es otro de los pilares fundamentales de este juego. No exagero si digo que, probablemente, sea uno de los shoot'em up más infernales y complicados que he llegado a jugar en toda mi vida, por no decir el que más.
Durante todo el tiempo que estás sobrevolando los escenarios la acción es constante, con unas imágenes deslumbrantes, sí, pero también con un cielo que vas recorriendo que puede acabar siendo una de tus peores pesadillas. Es una auténtica locura la cantidad de enemigos y disparos que pueden estar desfilando constantemente por todas partes, resultando imposible que puedas esquivar todo lo que tienes alrededor, aunque también es comprensible porque se nota que la jugabilidad está diseñada para que recibas algún que otro impacto.
Al contrario que otras propuestas del mismo género, aquí no mueres de un solo golpe. La nave que se pilota está equipada con una serie de escudos que son los que hacen la función de puntos de vida y que se van reduciendo a una velocidad pasmosa. Por suerte, la inmensa mayoría de enemigos sueltan unos objetos que son los que no hay que dejar escapar jamás y que son los que recuperan uno de estos escudos para que la nave se fortalezca. Por eso mismo el título te deja bien claro que vas a sufrir y vas a ser dañado inevitablemente en algún que otro momento, porque nunca puedes dejar escapar estos objetos.
Asimismo, otro motivo por el que resultan tan esenciales es que uno de los botones sirve para transferir la energía de los escudos a la de los disparos y así generar misiles demasiado devastadores. En este sentido, se logra que tengas que estar constantemente moviéndote, disparando, recogiendo escudos, transformarlos en misiles y dispararlos, por lo que es un no parar de realizar acciones de todo tipo. Eso sí, el cambio de energía es en un sentido único, por lo que luego no puedes volver a convertirla en escudos.
Por lo tanto, hay que administrar adecuadamente estos puntos tan vitales para tener claro cuándo necesitas energía y cuándo misiles, porque con el disparo normal y corriente no cabe duda de que no es suficiente para salir adelante, dado que una buena parte de los enemigos caen con ellos, sí, pero otros tantos requieren tantísimas balas que al final la única forma de destruir rápidamente a las naves contrarias es con los misiles.
Hasta este punto, es innegable que Cygni es uno de esos juegos de los que te hace sudar la gota gorda, sin importar su nivel de dificultad, porque hasta en el más fácil es una locura lo exigente que se puede volver. La única ventaja con la que partes en el nivel más bajo de todos es en el hecho de que cuentas con tres vidas, reapareciendo en el mismo lugar en el caso de ser destruido, por lo que la acción no para y no regresas a la pantalla de inicio a no ser que las pierdas todas.
En cambio, en los niveles de dificultad superiores solo dispones de una única vida, nada más. Imaginaros lo que tiene que ser estar avanzando por una fase que dura más de diez minutos, en la que no paran de surgir enemigos despiadados, con una lluvia infernal de balas, en un recorrido en el que todo lo que aparece por los alrededores es hostil y en el que tienes que repetir absolutamente todo el camino, sin importar lo lejos que hayas llegado, en el caso de que seas eliminado. Ahí es cuando este juego te empieza a causar pesadillas.
Por eso mismo, no me escondo al reconocer que no me quedó más remedio que optar por pasármelo en el nivel de dificultad más bajo y aun así hubo momentos en los que sufrí demasiado. Pero es que los niveles superiores es una locura lo complicados que se vuelven, ya que los enemigos son más agresivos todavía, más duros, hay más balas para esquivar y hasta los recursos escasean más, por lo que te obliga a pensar con más conciencia todavía cuáles acabas destinando a proteger la nave y los que pasan a ser energía de misiles.
Lo curioso es que todo esto afecta principalmente a lo que es la fase en sí, porque al final de cada una de ellas aguarda un jefe final con sus propias mecánicas y con una cantidad de vida elevadísima. Sin embargo, la dificultad de estos no es ni por asomo tan complicada como la del resto del propio nivel, así que son batallas un tanto asequibles dentro de lo que cabe, pero lo que no cabe duda es que aquellos que busquen un reto de los pies a la cabeza lo encontrarán en el trabajo de KeelWorks.
La personalización al detalle de la nave
El tener que empezar la fase desde el principio si mueres puede acabar siendo un tanto frustrante, pero más aún por el motivo de que al finalizarlas recibes una cierta cantidad de dinero que se puede intercambiar por mejoras para la nave, ya sea para modificar la forma de la trayectoria del disparo dependiendo de los escudos que tengas o para desbloquear otra serie de mejoras. Algunas de ellas se notan más que otras, aunque también con bastante más caras y requiere tener que obtener una buena suma o repetir alguna de las pantallas ya superadas previamente.
Aún así, por mucho que alguna de estas mejoras sea tan importante, no quiere decir que sean imprescindibles y que la situación pegue un cambio radical, porque el juego sigue siendo igual de complicado en todo momento. En cualquier caso, hay hasta dos bloques de configuración disponibles en el caso de querer probar distintos tipos de equipamiento para comprobar cuál de ellos otorga un mejor resultado.
Además, no es que todas las mejoras estén relacionadas con los disparos que salen de la nave para arrasar con la mayoría que se desplazan por el aire. También es posible decantarse por otro tipo de disparo para eliminar unidades terrestres que no son tan frecuentes, pero sí lo suficiente como para llegar a ser una molestia a la que te descuides o decidas ignorarlas, así que se convierte en otro detalle más a tener presente mientras estás tratando de sobrevivir en esta guerra tan salvaje.
Al menos, todas las mejoras que se van desbloqueando se quedan permanentes y se pueden activar y desactivar cuando sea, independientemente del modo de juego que se escoja, porque el otro principal más allá de la campaña es el modo arcade en el que hay que pasarse todas las fases del tirón sin parar, así que da igual si eres eliminado en la tercera o la cuarta, que tienes que empezar desde el principio una vez más. Es lo que se podría llamar como el desafío definitivo.
La opinión de VidaExtra
Cygni: All Guns Blazing tiene puntos que me han conquistado de lleno y otros que me han generado dudas. En general, la balanza se inclina más a recomendarlo, porque la dificultad es demasiado elevada en muchos momentos y es un reto titánico, pero también es cierto que el espectáculo cinematográfico que te hace vivir es brillante. No inventa la rueda en el género, pero sí que sabe aportar su propia personalidad para brindarnos una propuesta de las que no puedes apartar la vista ni un solo segundo por todos los efectos que aparecen y en la que disfrutas disparando cada bala contra los ejércitos de enemigos alienígenas.
El que en la mayoría de ocasiones te haga sudar tanto es lo que me hace considerar que no sea un título apto para todo tipo de jugadores. No obstante, los aficionados a los shoot'em up y que busquen un desafío a la altura deberían de darle una oportunidad sin ninguna duda, con una jugabilidad muy satisfactoria, adictiva, asombrosa y uno de esos juegos a los que de vez en cuando te apetece volver para repartir balazos a diestro y siniestro.
Precio de Cygni: All Guns Blazing
El lanzamiento de Cygni: All Guns Blazing tendrá lugar el 6 de agosto y se producirá en formato físico y digital. Los que queráis tenerlo con su respectiva caja lo tenéis a la venta por 29,99 euros en PS5 y Xbox Series X/S. Por el contrario, a los que opten por la versión digital les costará exactamente lo mismo en PlayStation Store, en la tienda de Microsoft y en Steam para PC.
Cygni - All Guns Blazing - PS5
Duración de Cygni: All Guns Blazing
Si tenemos en cuenta únicamente la duración de la campaña de Cygni: All Guns Blazing y nada más, poniéndonos en el caso de superar todas las fases a la primera, es probable que en poco más de una hora os paséis el juego. Naturalmente, aquellos que quieran ir a por el 100% deberán de rejugar los niveles y también está el modo arcade que aumenta el entretenimiento más todavía.
Cygni: All Guns Blazing
Plataformas | PC, PS5 (versión analizada) y Xbox Series X/S |
---|---|
Multijugador | Sí (1-2) |
Desarrollador | Keelworks |
Compañía | Konami |
Lanzamiento | 6 de agosto de 2024 |
Lo mejor
- El espectáculo gráfico que desfila en pantalla.
- La acción tan desenfrenada que no cesa nunca.
- Un rendimiento perfecto para tanto efecto.
Lo peor
- Te castiga demasiado si mueres.
- La dificultad es excesiva elevada en niveles superiores.
En VidaExtra | Los 13 videojuegos más esperados de la segunda mitad de 2024
Ver 0 comentarios