'Kokuga': análisis

No suelen caer demasiados shooters por aquí, así que cuando uno llega acabas viéndote obligado a darle una oportunidad. No es el caso de 'Kokuga', que tiene razones suficientes para llamar tu atención. Que cumpla o no ya es otra historia completamente distinta.

Desarrollado por G.Rev, 'Kokuga' aterrizó en la eShop de Nintendo 3DS hace unos días prometiendo acción frenética, disparos especiales y decenas de proyectiles enemigos a esquivar. Lo que prometía en sus vídeos lo entrega a nivel jugable, eso no se lo niego, pero lamentablemente queda a medio camino entre la satisfacción y el mero trámite contra el aburrimiento.

Kokuga: esquivar y disparar

No hay una historia que enganche y, francamente, tampoco la necesitamos. Esto va de disparar robots subido en un tanque estilo Tachikoma, y hasta la presentación de los niveles a escoger es simple, simplemente ofreciendo una lista de niveles que van de la A a la Z a los que toca sumar tres encuentros finales distintos.

Como veis no hay muchas pretensiones y eso juego bastante a su favor. Te apetece pegar cuatro tiros, sólo o en compañía, los pegas y a otra cosa. Algo así como el clásico juego para móviles de partidas fugaces y recuerdo volátil. El problema es que esa clase de propuestas llegan entrando por los ojos a un precio irrisorio, y en este caso los 14,99 euros de 'Kokuga' juegan en su contra.

El movimiento de nuestro tanque con patas lo controlamos con el joystick, el botón B sirve para disparar y el cañón se rota con los gatillos L y R. No hay mucho más que rascar en ese aspecto. La agilidad del vehículo es bastante limitada, y eso implica ir con pies de plomo en vez de a lo loco, por lo que a la hora de esquivar el juego tira más de paciencia y reflejos que de habilidad.

Power ups en el bolsillo

Son sus reglas y es completamente aceptable, pero la inteligencia artificial de los enemigos no es una revolución, y pronto aprendes que las esquinas de los escenarios son un buen cobijo para evitar caer en combate y disparar desde lejos te permitirá solventar los niveles casi sin problemas.

La estrategia empleada por G.Rev frente a los ataques especiales sigue también por el camino fácil. Tienes una serie de tarjetas en la parte táctil de 3DS que podrás usar a tu antojo, pero además de limitadas son aleatorias, por lo que tendrás que pensar antes de actuar y, admitámoslo, en un shooter con misiles teledirigidos apuntando a tu cabeza no hay mucho tiempo para eso.

Al final la mejor estrategia es guardar todo para los enemigos finales y, entonces, sacar toda la artillería para despacharlo lo antes posible. Puede fastidiarte el día obligándote a volver a pasar por la línea de salida, pero no tardas demasiado en cogerle el truco. No es que la situación pase de complicada a coser y cantar, pero acaba asimilándose más a una lucha entre un helicóptero apache y un gato con ganas de arañarte la cara.

Kokuga y las oportunidades perdidas

Lo más preocupante, ya que al fin y al cabo todo lo anteriormente mencionado es más una cuestión de gustos que de crítica negativa, es que la repetición de enemigos y escenarios puede convertir un juego más o menos divertido en algo soporífero. Por suerte los enfrentamientos finales de cada nivel ofrecen un reto a la altura, esa sorpresa a la espera de que continúes jugando. Un 3D muy poco logrado tampoco ayuda.

El multijugador, disponible para hasta cuatro jugadores en local y con un único juego, intenta salvar los trastos, pero creo que todos somos conscientes de que la consola tiene otras propuestas de ese estilo mucho más divertidas y variadas.

'Kokuga' no es un mal juego, no me malinterpretéis, pero sí una idea que pierde fuerza tras pasar por el filtro de precios de la Nintendo eShop. 15 euros es demasiado para un título al que acudir cuando tienes 10 minutos libres, y sobrepasar la barrera de las dos cifras puede ahogar a un catálogo digital que tiene ganas de destacar. Tal vez el problema es que yo soñaba con otro 'Ikaruga' y ambos títulos están a años luz.