Durante nuestra visita a la Madrid Games Week hemos tenido ocasión de probar una demo completamente nueva de Days Gone, el juego de acción y supervivencia que está desarrollando Bend Studio y sobre el que hace tan solo unos días se dio a conocer que iba a retrasar su lanzamiento hasta abril del año que viene.
La verdad es que la primera y única demo que probamos meses atrás nos dejó con unas sensaciones de todo tipo, tanto positivas como negativas en ciertos aspectos. Por eso mismo teníamos tantas ganas de jugar a esta nueva prueba para así descubrir si el desarrollo del juego ha mejorado a lo largo de este tiempo.
Lo único que podemos adelantaros es que se nota que todavía quedan unos meses por delante hasta que Days Gone salga a la venta, porque al juego le quedan unos cuantos detalles por pulir, pero mejor vamos a repasarlos más detenidamente.
Resolviendo las misiones de sigilo
Al igual que sucedía con la demo de Kingdom Hearts III que se dividía en dos partes completamente diferentes, con la de Days Gone ocurría exactamente lo mismo y nos presentaba dos misiones que no tenían nada que ver la una con la otra. En el caso de la primera desconocemos en qué punto del juego se ambientará, pero tuvimos que emplear a conciencia las habilidades de Deacon y los pocos recursos que tenía a su disposición para salir adelante.
La demo nos dejaba en los alrededores de una gasolinera que tenía unas casas a su alrededor y unos cuantos freakers, los zombis de este juego, vagando por los alrededores. Desde un primer momento quedaba claro que no iba a ser sencillo obtener los materiales que necesitábamos, por lo que había que desplazarse muy sigilosamente sin alertar a estos peligrosos seres de nuestra presencia.
El sigilo es uno de los elementos clave del juego porque, al igual que ya comprobamos en la anterior demo, los enemigos serán capaces de hacernos picadillo muy rápidamente y sobre todo si se juntan varios para atacarnos al mismo tiempo. Por eso mismo siempre que podamos hay que pillarles desprevenidos para así aniquilarlos con las armas que tengamos para defendernos cuerpo a cuerpo, porque, como nos liemos a repartir tiros, podéis tener garantizado que estaréis en un serio aprieto.
Algunos de los detalles que destacaban de esta demo es que nos encontramos con un nuevo tipo de freakers más pequeños de lo normal que en un principio no parecían tener ganas de atacarnos y que estaban situados en los tejados de las casas. Eso sí, si nos atrevemos a invadir su zona entonces no se andarán con tonterías y pasarán a la acción al instante, al igual que si detectan que tenemos muy poca vida.
El encontrarnos contra las cuerdas no es algo que resulte muy extraño, porque los freakers nos quitan bastante vida por cada golpe que nos asesten y tampoco es que los recursos para recuperar la vida abunden demasiado. Deberemos de recorrer hasta el más mínimo rincón en busca de cualquiera material que nos pueda ser de ayuda para fabricar botiquines, vendas o incluso para localizar munición para nuestras armas, porque las balas que tendremos a nuestra disposición también serán un tanto limitadas.
Por otro lado, en la zona en la que se ambientaba la demo estaba lloviendo con gran fuerza y hay que reconocer que el efecto de la lluvia no está muy bien logrado. En todo momento daba la impresión de que teníamos una ducha encima de la cabeza por la cantidad de agua que caía encima de nuestro protagonista en comparación con el resto del escenario. Eso sí, esperamos que sea algo puntual de la demo.
Haciendo frente a las gigantescas hordas de freakers
Como ya hemos señalado anteriormente, la primera parte de la demo nos obligaba a jugar más calmadamente y la segunda parte nos presentaba una misión que poco o nada tenía que ver. Si bien antes podíamos pasar de largo de los freakers tratando de que no nos localizaran, aquí teníamos que hacer frente a una horda enorme de formada por decenas y decenas de ellos.
El escenario en el que se ambientaba esta misión estaba plagado de contenedores, camiones, barriles que podrían volar por los aires y otros tantos elementos con los que podíamos interactuar. Y es que el objetivo consistía en no dejar a ni un solo freaker con vida de esta horda. Solo con verla de lejos ya resultaba impresionante y solo bastaba con que uno de ellos notase nuestra presencia para que todos se lanzaran en masa para hacernos trizas.
Por eso mismo era importante estudiar bien el entorno primero y trazar un buen plan**** sobre dónde debíamos movernos para no quedarnos atascados, porque la resistencia de los freakers es infinita pero la nuestra no y por lo tanto **huir de ellos sin parar no solucionará nada. Al menos para esta misión sí contábamos con más armas de fuego, cócteles molotov y granadas de fragmentación para así causarles grandes daños.
La misión no tenía una única forma de ser completada y por lo tanto los jugadores tenían que demostrar su ingenio y habilidad para salir con vida de este desafiante encuentro que no nos daba ni un solo segundo para respirar. En este sentido, un mal movimiento o pensarnos demasiado qué debíamos hacer o por donde ir suponía una muerte garantizada.
Al menos Deacon cuenta con una habilidad que le permite ralentizar el tiempo durante unos cuantos segundos, lo que nos otorga la posibilidad de elegir rápidamente qué arma u objeto queremos emplear en lugar de tener que hacerlo mientras corremos de un lado para otro. Lo que no nos gustó tanto fue que el juego se ralentizaba cuando había demasiados freakers cerca de nosotros y tampoco se distinguían bien sus cuerpos al parecer un gran amasijo de cuerpos deseando devorarnos.
Es comprensible que sea complicado mover tantos enemigos al mismo tiempo y lograr que se vea perfectamente, pero para un título triple A de estas características es de esperar algo que luzca al menos un poco mejor. Aun así, no os penséis que el apartado visual del juego en general no es que sea muy bueno, porque si os fijáis solo hemos destacado algunos detalles muy puntuales.
En resumidas cuentas, alegra ver que Days Gone nos pondrá frente a situaciones tan distintas que nos obligarán por completo a modificar nuestra forma de jugar dependiendo de la misión que nos sea planteada. El mundo abierto que está preparando Bend Studio tiene unas ideas muy prometedoras que nos hacen pensar que puede acabar siendo un gran exclusivo para PS4, pero tiene todavía que mejorar otros aspectos para convertirse en una compra muy recomendada.
Veremos a lo largo de los próximos meses si este nuevo retraso que ha sumado sirve para que el producto final acabe siendo magistral o finalmente se queda a medio camino. Para ello tocará esperar hasta el 26 de abril, el nuevo día que se ha asignado para su lanzamiento.