El mes pasado suponía el cierre del 2022 y The Callisto Protocol se presentaba como el broche de oro para el año. Sin embargo, la obra de Striking Distance Studios se quedó muy lejos de colmar las expectativas y su rendimiento técnico fue más que problemático.
A un mes vista desde su lanzamiento, varias voces del equipo de desarrollo han salido al paso para denunciar una práctica habitual en la industria. Gamesindustry.biz se ha puesto en contacto con diversos trabajadores y fuentes del estudio que aseguran que alrededor de 20 empleados no han sido acreditados debidamente.
"Por supuesto que duele. Es una putada. Hice una buena cantidad de contribuciones y trabajé en ello durante [un período de tiempo]. Simplemente no estar ahí es una mierda", expresa uno de los miembros consultados. Y es que Striking Distance Studios no posee una política o comunicado al respecto de la omisión en los créditos.
Un relato apunta que no importa el estatus del desarrollador ni el tiempo que hubiesen estado involucrados en The Callisto Protocol, ya que perfectamente no aparecen en los créditos. Según las fuentes, hablamos de personal que trabajó con Glen Schofield, incluso anteriormente con Sledgehammer Games.
Favoritismos e inconsistencias
Un punto clave en el relato de los empleados es el referido a los favoritismos a la hora de escoger quién aparece en los créditos. "Mi impresión es que eligieron a las personas que les gustaban o con las que tenían algún tipo de relación, y esos obtendrían crédito y los demás no", asegura un desarrollador.
Por otro lado, no hay un baremo exacto de cómo se debe acreditar a un miembro del estudio. Esto es debido a que antiguos trabajadores han sido incluidos como "ayuda adicional" en sus departamentos, otros derivaron a la categoría de "miscelánea" y varios ni siquiera aparecen en pantalla. Según la Asociación Internacional de Desarrolladores de Videojuegos, todo desarrollador debe ser acreditado en un juego tras haber trabajado un mínimo de 30 días en el proyecto.
Finalmente, las fuentes han vuelto a reiterar la situación de crunch que Glen Schofield defendió -y posteriormente rectificó-, señalando que "los diseñadores que conozco trabajaban 10 horas al día solo en reuniones. Luego, tuvieron que hacer crunch solo para hacer básicamente el trabajo que tenían que hacer. La política es no hacer horas extras, pero siempre estás haciendo horas extras". Por ahora, Striking Distance Studios no se ha pronunciado al respecto.
Ver 1 comentarios