La última entrega del crossover de Nintendo fue el verdadero pelotazo de finales de 2018. Ahora, casi un año después, Super Smash Bros. Ultimate ha conseguido erigirse como el juego de lucha más vendido de la historia.
Recientemente, en el informe trimestral de Nintendo, se desveló que el juego había vendido 15,71 millones de unidades en todo el mundo hasta el 30 de septiembre de 2019. Cifra con la que desbanca a su mayor contrincante: Street Fighter II (vía Digital Trends).
El clásico de Capcom se ha mantenido como rey indiscutible de este particular género durante lustros. Entre todas sus versiones (que no han sido pocas precisamente) ha amasado un total de 15,5 millones de unidades vendidas, cifra que ha sido levemente superada por Super Smash Bros. Ultimate. Eso sí, en el caso de Street Fighter II no se cuenta la versión de SNES Mini, ya que al ser una consola con un puñado de juegos incluidos, no se consideran ventas individuales.
Un logro remarcable para Smash, especialmente teniendo en cuenta que no lleva ni un año en el mercado. Aunque algo se podía intuir, ya que en diciembre se convirtió en el juego que más rápido se había vendido de toda la historia de Nintendo, con 12 millones de unidades en solo unas semanas.
La saga no es ajena a estar en el top de los más vendidos. Justo por detrás de Street Fighter II está Super Smash Bros. for Wii U/3DS, con 14,85 millones de copias. Le sigue Super Smash Bros. Brawl, con 13,3 millones.
No es para menos. No olvidemos que Ultimate también alcanzó el mayor pico de espectadores en la historia de la competición de EVO. Este se concibió como la entrega definitiva, como su propio nombre indica, y todavía le queda cuerda para rato. Faltan dos personajes de la primera tanda de DLCs, y luego está por llegar la segunda, ya anunciada.
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