El pasado fin de semana unos usuarios decidieron que la idea de enviar mediante Xbox Live, un mensaje de forma masiva vendiendo una niña podría ser algo divertido.
El mensaje incluía el número de teléfono de la madre de una niña de dos años y se cerraba con la frase: envío gratuito.
Los problemas empezaron cuando la madre comenzó a recibir llamadas recriminándola por poner a su hija a la venta. Insultos, amenazas e incluso ofertas, fueron llegando una tras otra hasta que la mujer fue a denunciar.
Pese a la seriedad del asunto me gustaría destacar la siguiente frase:
“Sobre la decimoctava o decimonovena llamada, comencé a sospechar que algo pasaba”
No se si reír o llorar. ¿A la decimoctava llamada? Señora ¿no se había dado cuenta antes?
Parece ser que tras denunciarlo la madre podrá tomar acciones legales contra los gamberros que pusieron en circulación el mensaje.
Posiblemente gamberros no se la forma más acertada de definirlos, pero sí la más correcta teniendo en cuenta que por aquí nos leen menores.
Vía | Kotaku
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