Queda poco más de un mes para que Microsoft lance al mercado Xbox One X, la revisión de su actual sobremesa rediseñada por dentro para ofrecer a los usuarios la consola más potente del mundo y, tras nuestras recientes impresiones, queda claro que se trata del auténtico salto a las 4K que esta generación de sobremesas lleva intentando dar desde casi el comienzo.
Para conseguir dar el paso a la llamada Ultra Alta Definición -algo que acabaremos dando con el tiempo- en sobremesas, Microsoft apostó por dos conceptos simples: lo primero es un SOC (System on a Chip) de nada menos que 6 teraflops, pero también es necesario que el diseño de los componentes internos no pase factura a nuestra experiencia de juego, y eso incluye evitar que una consola con esta tecnología se sobrecaliente.
A través de su canal de Youtube, Linus Tech Tips ha tenido la oportunidad de ensamblar desde el propio Campus de Redmond (sede de la división Xbox) un modelo de Xbox One X, aprovechando para mostrar los componentes internos y su función en la propia consola. Para empezar, bajo estas líneas puedes ver cómo es la majestuosa Xbox One X reducida a sus múltiples componentes.
Tal y como dijimos, la clave de esta consola está en un enorme chip principal, el SOC sobre el que se sostiene el propio proyecto, condensando tanto la CPU de 8 núcleos y a 2,3 Ghz, como la GPU de 40 CU y 6 Teraflops por segundo, en un único componente. Eso sí, la clave para extraer el potencial de este chip está en su cámara de vapor, la cual controla en todo momento su temperatura.
El diseño de la consola por dentro está muy bien planificado: el disco duro de un terabyte está aislado y dispone de cierta amortiguación para que su vibración no afecte al resto de elementos ni emita ruidos. Además, un voluptuoso ventilador de 120 milímetros refuerza la propia ventilación interna.
Al igual que en la Xbox One S, la fuente de alimentación será interna, dejando de lado esos ladrillos vistos en los cables de los modelos anteriores de Xbox, pero su potencia será duplicada a 245 vatios, según se indica en el vídeo. Como nota interesante, el diseño del mismo no solo lo deja cerca de las rendijas de salida, sino que recibe aire desde el propio ventilador.
Además, la consola integra un lector Blu-Ray 4K UHD, lo que la convierte en un reproductor multimedia de vanguardia en caso de que seamos cinéfilos empedernidos, completando el puzle de componentes internos y que se blinda con una cubierta de metal con un interesante sistema de malla de panal muy fina que refuerza todavía más la ventilación.
El ensamblaje también es sencillo: la carcasa consta de dos únicas piezas, deslizando la parte superior una vez hemos fijado la más pequeña. Por último, Xbox One X mantiene intactos los conectores traseros de la consola con respecto a los vistos en Xbox One S, con lo que la transición entre ambas sobremesas es tremendamente sencilla.
Xbox One X estará disponible a partir del 7 de noviembre y ya puede reservarse en distintas tiendas oficiales. ¿Será ese salto vanguardista inter-generacional que esperan ver los usuarios? Por lo pronto, jugar en 'Forza Motorsports 7' en esta nueva consola es una experiencia espectacular.
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