The House of the Dead: Overkill

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Si quieres zombies, sangre, disparos, buenos gráficos, acción a raudales, mecánicas simples y humor negro por doquier; tú lo que quieres es ‘The House of the Dead: Overkill’.

Veinte minutos escasos para jugar antes de salir hacia el cine, el trabajo, el bar… Pocas o ninguna gana de aguantar tediosas conversaciones sobre la decadencia del género humano y las preocupaciones de un ex-marine con la vida de una raza alienígena en la palma de la mano. Sin ganas de viajar por menús tan bellamente diseñados como desesperantes cuando lo único que quieres hacer con tu tiempo es jugar.

Lo único que te apetece hacer es evadirte un rato, reírte con un par de chistes sobre tetas y pedos, reventar unas cuantas cabezas, y trasladar después tu atención hacia otros asuntos.

El jugar por jugar, ese ha sido, es, y será, el objetivo de un juego puramente arcade. Y eso precisamente es lo que ‘The House of the Dead: Overkill’ nos ofrece.

Bebiendo directamente de lo peor (o lo mejor) del cine de serie B, el shooter de Sega se ríe de todas las escenas, localizaciones, personajes y clichés que el género de terror ha dado a luz en los más de cien años que el mundo del cine lleva a sus espaldas.

Con un humor muy negro, fallos de raccord y chistes políticamente incorrectos, la aventura de ‘The House of the Dead: Overkill’ consigue robarte más de una sonrisa. Un acierto por parte de Sega, aunque también debemos reconocer que hacer las cosas mal adrede no es tan difícil.

‘The House of the Dead: Overkill’ cumple con nota su cometido: es un juego tremendamente entretenido, ya sea solo o en compañía.

Además nos introduce nuevos añadidos al esquema clásico de la saga. El primero de ellos, y más importante, es la posibilidad de utilizar los puntos cosechados durante las partidas para adquirir y mejorar armas.

Así, en vez de pasarnos todo el juego con la pistola, o tener que estar controlando el gasto de munición, usaremos las bonificaciones obtenidas con nuestros headshots y desmembramientos para comprarnos una escopeta, una uzi y hasta un rifle de asalto.

Armas que una vez mejoradas nos convertirán en una máquina de liquidar zombies que dejará un festival de sangre y vísceras a su paso.

Contamos además con la posibilidad de pasarnos el juego sin despeinarnos, ya que contaremos con vidas infinitas durante nuestro primer viaje, en un acercamiento a otros públicos menos experimentados.

Será una vez completado el juego cuando desbloquearemos el modo clásico, el puñetero que acababa con nuestros ahorros en una tarde de vicio en las recreativas.

No nos engañemos, llevo comentándolo desde el principio, ‘The House of the Dead: Overkill’ no es un juegazo, pero si un juego que aprovecha las características de Wii y que nos aportará horas de diversión en compañía.

También en solitario, pero yo soy de los que disfrutan más comentando la jugada y compitiendo con algún amigo por ver quién rebana más miembros.

En resumen, si lo que quieres es desconectar un rato sin tener que preocuparte por argumentos y mecánicas de juego enrevesadas, disfrutando de buenos gráficos y un control eficiente ‘The House of the Dead: Overkill’ es una muy buena compra.

Ficha Técnica: ‘The House of the Dead: Overkill’ Plataformas: Wii Distribuidor: Sega Estudio: Headstrong Games Lanzamiento: Ya disponible Precio: 49,95 euros

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