La industria es como es y así hay que quererla. Existen unos cuantos gigantes que destrozan todo a su caminar y frente a los que puedes tomar dos actitudes, o te rindes y comulgas con sus propuestas o intentas labrarte tu propio porvenir y eso, si no se tienen contactos, es más difícil que entender ‘Donnie Darko’.
Pero parece que para los pequeños estudios y publishers que intentan el modo Bruce Willis y se lanzan al vacío, pasando de las grandes firmas, se ha abierto un punto de luz en el firmamento al que pueden aferrarse.
El hecho de que las grandes compañías estén pasando de PSP de la manera tan brutal en la que lo hacen, aunque recordemos que este año la mismísima Sony (mamá de la criatura) tiene un buen puñado de títulos para revivir el amor en su portátil, está beneficiando a las compañías pequeñas que ven así terreno libre para vender sus productos.
Así, al menos, lo afirma Marco Minoli, director de Slitherine, una editora británica de videojuegos que entiende el pasotismo de los grandes como la oportunidad de oro para volcarse en PSP y producir grandes juegos ajenos a las marcas conocidas.
“PSP ha sido buena para nosotros. Actualmente vendemos mucho producto en ella. Hay una gran oportunidad de negocio ahí fuera. Estamos dándonos cuenta de que los publishers muy grandes no apuestan por PSP, no la están usando, así que ahí existe un gran agujero en el mercado para que nosotros, los más pequeños, podamos explotarlo.”
No sólo eso, sino que además , Minoli, da las gracias a Sony por el fenomenal apoyo que brinda a las compañías pequeñas que intentan empezar en el terreno de PSP.
“Sony, además, es muy buena con nosotros. Proveen un soporte técnico increíble que jamás se había visto en otra empresa. En eso no tienen rival.”
¿Un cuento de amor entre Sony y un publisher? De cualquier modo, lo que parece claro es que un agujero de mercado sí que existe. Una consola que tiene muchísimas ventas, quizá no es comparable con DS pero sus números no son para nada malos, y que ofrece una oportunidad para que estudios pequeños se embarquen en desarrollos al no tener que competir con productos respaldados por grandes marcas y mucho dinero.
Desde luego, a PSP le queda mucha caña por dar.
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