Por qué todos queremos una mini NES

Ha sido sin lugar a dudas la noticia del día y una de las mejores que nos ha podido dar Nintendo en las últimas semanas, sobre todo para los más nostálgicos y amantes de los juegos retro. La gran N ha anunciado el regreso de la clásica NES en formato mini, la oportunidad perfecta para poder volver a disfrutar esas grandes joyas que nos hicieron pasar grandes momentos hace unas décadas.

Desde luego por la red el anuncio ha corrido como la pólvora y no son pocos los que han aplaudido un anuncio de este tipo, hasta el punto de dejar reservada ya la cantidad de dinero necesaria para hacerse con ella en cuanto sea lanzada en noviembre. Pero, ¿por qué es tan importante este anuncio si hablamos de una consola antigua?

A muchos les extrañará por el hecho de hablar de una consola "tan vieja", cuando lo que importa verdaderamente es que anuncien de una vez por todas la NX. Sin embargo, es imposible no alegrarse y emocionarse por algunos de los siguientes motivos que pasamos a contaros a continuación.

30 clásicos, 30 juegazos

La Nintendo Classic Mini contiene un total de 30 juegos diferentes instalados, entre los que están: 'Kid Icarus', 'Castlevania', 'Donkey Kong', 'Final Fantasy', 'Mega Man 2' o los primeros 'Super Mario Bros.'. Con clásicos tan importantes es inevitable no tener ganas de disfrutar de todos ellos de nuevo o por primera vez, dependiendo de la época en la que haya crecido cada uno.

Lo que es seguro es que todo el mundo conocerá alguno de todos estos títulos, aunque sea de oídas como mínimo.

Los gráficos no son lo más importante

Al estar hablando de juegos de NES nos encontramos con unos gráficos retro, de 8 bits, por lo que tampoco podemos esperarnos grandes maravillas si los comparamos naturalmente con juegos de hoy en día.

Aún así, en aquel momento todo lo que veíamos era impresionante, no había nada igual y los gráficos no importaban en absoluto. Solo apetecía pasar una tarde divertida con los títulos que tuviésemos en nuestra posesión.

El soplar los cartuchos para hacerlos funcionar

Es sin duda uno de los mayores mitos que existen en los videojuegos. Seguro que todos conocemos a alguien que ha cogido alguna vez un cartucho para realizar esta peculiar acción como era soplar la rendija de los juegos si la consola no los reconocía. Lo que llama la atención es que en la mayoría de ocasiones era la solución perfecta. ¿Casualidad? Quien sabe, habría que preguntarle a los chicos de "Cazadores de mitos".

Los inicios de sagas muy populares

Todo el mundo sabe que Mario, Link, Samus o Mega Man cuentan con numerosas entregas a sus espaldas, pero ¿cómo empezaron su andadura en el mundo de los videojuegos? Algunas de estas joyas dieron sus primeros pasos en la NES y si no fuese por aquella consola rectangular igual hoy en día no conoceríamos a algunos de estos personajes tan míticos.

No tener el tiempo necesario para jugar

Nos quejamos sobre el hecho de que hoy en día la duración de los juegos no es muy elevada o son demasiado cortos. No obstante, en la época de la NES era difícil llegar a completar determinados juegos, porque no había puntos de guardado o diferentes partidas en las que salvar nuestro avance.

Anda que no molestaba estar en el mundo 8 de 'Super Mario Bros.', morir cien veces y que de repente tu madre te llamase para ir a hacer los deberes. Adiós a todo el trabajo y el esfuerzo depositado.

Pasarte los juegos mil veces

Aún así, siempre había ganas de volver a jugar y reintentarlo. Puede que fuese por la falta de competencia o porque era uno de los mayores entretenimientos que existían, pero no son pocos los juegos de NES que importaba más bien poco la cantidad de veces que los completases.

Solo importaba jugar, divertirse, pasar un rato entretenido y ya de paso probar nuevas mecánicas o cosas nuevas que no nos dio por hacer en partidas anteriores.

Las contraseñas apuntadas en un papel

Por suerte, a falta de juegos que nos permitiesen salvar nuestro avance, había algunos que nos proporcionaban contraseñas. Así, una vez empezásemos de nuevo la partida, podríamos seguir por donde lo habíamos dejado, aunque había algunas que eran tan extremadamente extrañas o largas que estábamos obligados a apuntarlas en un papel porque era imposible de memorizarlas. Tan solo tenéis que echar un ojo a las de los 'Mega Man', por ejemplo.

Sin vídeos que nos diesen la solución

Había juegos que suponían un verdadero reto el llegar a superarlos. Ya fuese por su elevada dificultad o porque duraban demasiado, nos costaba demasiado llegar a ver los créditos. En aquel momento no existía Internet para saber qué hacer, no había vídeos que nos diesen la solución. Menos mal que las revistas de videojuegos nos proporcionaban en alguna ocasión guías que nos salvaban de estos problemas.

Créditos de lo más simples

Y hablando de los finales de videojuegos, desde luego los de los juegos de NES eran de lo más simples que os podíais imaginar. Después de tanto trabajo y horas para salvar a la princesa, el mundo o lo que fuese, en la mayoría de ocasiones aparecían unos finales de unos pocos segundos y de vuelta a la pantalla de inicio.

Sin duda el completar los juegos solo servía como satisfacción personal, porque para otra cosa...

También estaban los famosos trucos

Todos hemos oído hablar del famoso código Konami, pero muchos títulos escondían siempre alguna combinación de botones que nos ofrecía siempre alguna ayuda. Ya fuese para saltarse los niveles, reducir la dificultad u otorgarnos otras ventajas, los trucos siempre venían bien para hacer más llevadera la aventura si se nos hacía demasiado cuesta arriba.

Yo tengo más puntos que tú

Algo que se ha perdido en la inmensa mayoría de videojuegos que existen hoy en día son los puntos. Por derrotar enemigos, recolectar objetos o completar las fases en el menor tiempo posible algunos juegos de NES nos recompensaban con una cierta cantidad de puntos. Una buena manera de competir con nuestros amigos por ver quién era capaz de conseguir más que el resto.

La época dorada del 2D y los juegos de plataformas

El salto a los gráficos en 3D tardo muchos años en llegar. En la época de la NES todo lo que veíamos era en 2D y la inmensa mayoría de juegos eran de plataformas, un género que con el paso del tiempo ha dejado de ser tan popular. Una lástima la verdad, porque pocos juegos son capaces de igualar y transmitir tanto como lo hizo en su momento el genial 'Super Mario Bros. 3'.

Dos botones eran más que suficientes

La situación actual es: pulsa A para esto, B para esto otro, X para hacer esto, Y para hacer aquello, L1 si quieres ejecutar esta acción o R3 para llevar a cabo esta otra. Al final todo acaba siendo un engorro, demasiado difícil de memorizar, sobre todo si dejamos pasar demasiados días desde la última vez que hayamos jugado.

La NES iba a lo rápido y sencillo, dos botones y una cruceta. ¿Para qué más? No hacía falta tutoriales ni nada, porque en un par de minutos ya sabías jugar perfectamente.

Los enormes televisores de tubo

Si se tiene una NES original y se quiere tener una experiencia perfecta es indispensable contar con un televisor de tubo, esos tan enormes a lo ancho y a lo largo que ocupaban casi todo el mueble donde los poníamos, para que la imagen se reprodujese correctamente. Al menos con la Nintendo Classic Mini no nos hará faltar contar con uno gracias a que dispone de una salida HDMI para así conectarla a cualquier televisor actual.

Una gran fuente de inspiración

La NES no cabe duda que marcó un antes y un después en la historia de los videojuegos. Si se han vendido más de 60 millones de unidades, por algo será. Un éxito que comparten juegos como 'Super Mario Bros.' o 'Super Mario Bros 3', por ejemplo.

Quizás sea por ello que algunas desarrolladoras siempre han tenido en cuenta a algunos de estos grandes clásicos a la hora de dar a luz a sus trabajos. Al mismo tiempo, en alguna ocasión han surgido guiños o elementos que más de una vez hemos visto en otros juegos que no son de Nintendo, como la frase "It's dangerous to go alone! Take this." del primer 'The Legend of Zelda'.

Lo retro siempre mola

Y en definitiva, si en los últimos años las compañías indie nos han sorprendido con juegos con una estética retro no es simple casualidad. Que sí, que todos adoramos ver unos gráficos ultra realistas, pero de vez en cuando también encanta observar esa estética con la que muchos de nosotros hemos crecido, con la que conocimos el mundo de los videojuegos y con la que siempre nos acompañará ese niño pequeño que hay dentro de nosotros.

En VidaExtra | ¡Vuelve la NES! Esta vez en formato mini y con salida HDMI