Tengo 25 años y llevo desde los 10 con una consola entre manos. Más de media vida viendo todo tipo de juegos buenos y malos, consolas que iban naciendo y otras que iban muriendo, pero siempre había algo en común que me hacía disfrutar de los videojuegos a un nivel que hoy en día es complicado: su dificultad.
Hace pocos días me he terminado uno de esos juegos imprescindibles que tenía pendientes de jugarme, el 'Call of Duty 4', y la verdad es que me ha gustado muchísimo. Habiéndolo jugado en una dificultad media, lo cierto es que sin dedicarle demasiadas horas a cada sesión, el juego me ha durado poco menos de dos tardes y una noche. Sé que la enorme virtud del 'CoD4' está en su online y demás, pero el juego como tal, el modo historia, me ha parecido cortísimo.
La misma sensación he tenido con el recién jugado 'Star Wars: El Poder de la Fuerza' (pronto habrá videoanálisis), que me lo pasé la semana pasada y creo que no me ha llegado a durar las ocho o diez horas de juego. Como este, podría poner ejemplos de juegos que, siendo excelentes en su trama y apartado gráfico, en su narración de la historia no duran más de diez horas de media. Otro caso es el 'God of War: Chains of Olympus', toda una demostración de poderío y buen gusto en una consola portátil que, si me apuras, en seis horas se puede ventilar tranquilamente.
Todo "por culpa" de los Puntos de Control y el Guardar Partida disponible en cualquier instante del juego. Antes no se podía ir, a duras penas, avanzando la partida a base de checkpoints y si perdíamos o nos mataban volvíamos al punto más cercano. Ahora tienes un checkpoint cada cinco minutos cuando antes no existían o se limitaban a ser alguno esporádico en niveles excesivamente largos.
Seguro que más de uno y más de dos dejábamos la consola encendida con el Pause y apagaba la tele para volver por la tarde o al día siguiente a seguir por donde se iba, porque no se podía guardar y había que recomenzar el nivel.
Recuerdo con gran frustración lo complicados que eran algunos niveles de los juegos que jugaba de chico. Cierto es que cuando uno tiene 11 años no se maneja ni tiene la misma experiencia ni soltura que con 19 o 25, pero había niveles del 'Snow Bros' que conseguían desesperarme y pillar cabreos tremendos.
Por no hablar del 'Golden Axe' o el 'Streets of Rage' que había veces en las que era literalmente imposible eliminar a todos los enemigos de la pantalla sin que ellos te eliminasen primero a ti. Otros como el 'Tetris' simplemente es que están diseñados para ser imposibles de completar.
Seguro que todos recordamos con rencor a ese nivel de aquel juego que tantísimas horas de frustración nos daba y tantísima satisfacción conseguíamos al completarlo, que íbamos al día siguiente al colegio emocionadísimos al contarles a nuestros amigos que por fin habíamos conseguido matar a ese malo que se nos resistía o habíamos completado la fase tan complicada que nos nos salía.
Hoy todo eso se ha perdido.
No digo que los juegos de hoy sean malos. De hecho, los tres que puse de ejemplo arriba me parecen auténticas genialidades, pero sí que se echa en falta, al menos en mi caso, un poco más de tensión entre los diferentes checkpoints y que cuando veamos uno digamos "por fin" en vez de dar por hecho que al girar la siguiente esquina se guardará sola la partida.
Ahora te toca a ti compartir con nosotros. ¿Cuál es el juego más difícil que has jugado en tu vida?, ¿cuál es ese nivel que, incluso intentándolo hoy en día, no has conseguido completar jamás?
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