Jax, el personaje más roto de la historia de League of Legends

Ya hicimos memoria hace unas fechas con la historia rocambolesca que tuvo la salida de Lee Sin. Uno de los campeones más icónicos de League of Legends fue una broma de mal gusto que acabó saliendo bien. Esta vez nos vemos las caras con un personaje que era capaz de meterse en la fuente enemiga y matar a tres, cuatro o incluso los cinco enemigos al esquivar todos los ataques. Ese monstruo fue el Jax de la primera temporada.

Cuando dodgear era algo más que irse de partida

Para entender todo lo que vamos a contar aquí hay que tener claro que antes del parche del 17 de enero de 2012 que vio nacer a Sejuani, el 1.0.0.132, existía una estadística de campeones similar a la Velocidad de Movimiento o el Poder de Habilidad llamada Esquivar. Objetos como las Botas de Tabi o el Bailarín Espectral otorgaban un porcentaje de esquiva, o lo que es lo mismo, posibilidad de evitar ser dañado por ataques básicos. Runas y Maestrías también podían aportar un extra en esta característica.

Tan solo cuatro campeones del juego tenían algún porcentaje de esquive de manera natural: Udyr podía lograr hasta un 9 % al usar habilidades en una ventana de cinco segundos gracias a su pasiva Agilidad de Mono, Sivir también lograba gracias a su habilidad pasiva Mil Pies un 10/15/20/25% según su nivel mientras estuviera moviéndose gracias a Mil Pies, Nidalee lograba un 10% transformada en tigre mientras que Jax conseguía esquivar básicos gracias a Contraataque. Sin embargo este último era el que más miedo daba porque era el único que recibía esa característica de manera incondicional durante toda la partida.

Riot tomó la decisión de eliminar esta característica por una razón. Su naturaleza aleatoria evidentemente era un problema tanto para el agresor como para el agredido ya que hacía complicado calcular el daño. Es verdad que el golpe crítico tambíen puede ser calificado como aleatorio pero, a diferencia de la esquiva, puede ser contrarrestado con objetos que otorguen resistencias. No había contramedidas.

Jax era un monstruo

Parece de otro juego ¿no? Pues por fuerte que pueda parecer había una forma de explotar esto de una manera que a día de hoy hace daño a los ojos y que si pasara ahora más de uno usaría la célebre combinación de teclas ALT+F4. Jax disfrutaba de esquive pasivo en Contraataque, en concreto del 10/12/14/16/18% según el nivel de la habilidad, además de que una vez activada esa E, aturdía a los enemigos esquivados durante un segundo. La habilidad duraba poco tiempo activada ya que hasta 8 segundos permitía stunear.

Jax era un tanque por esquive no por resistencias, ya que si no le puedes pegar, aguanta como un Galio. Además su habilidad pasiva le daba 300 de vida extra por cada 100 de Daño de Ataque adicional y 200 por cada 100 de Poder de Habilidad añadido al campeón. Por si esto fuera poco, los ítems con robo de vida como Sanguinaria o el Sablepistola Hextech estaban a la orden del día con Jax. Un bicho.