Sabíamos que el acuerdo con Mediapro acabaría reportando nuevas alianzas dentro del sector pero aún no sabíamos cuando llegarían. Esa incertidumbre se ha dado por finalizada hoy con el anuncio del patrocinio de Orange de la Liga de Videojuegos Profesional para las próximas temporadas.
El acuerdo coloca a Orange como principal patrocinador de la División de Honor de la LVP hasta el 2018, pero también servirá de apoyo para impulsar eventos propios como el de Gamergy. Gracias al acuerdo, el Gamergy Orange Edition ampliará su capacidad a más de 2.100 espectadores cuando se celebre el próximo mes de diciembre.
Además de eso el gigante de las telecomunicaciones se mete en los eSports de la mano de competiciones abiertas a cualquier jugador, que llevarán el nombre de Orange Cups y contarán con un circuito de eventos presenciales, y patrocinará las retransmisiones de las competiciones internacionales cuyos derechos posee la LVP: League of Legends Championship Series, Challenger Series, la final del mundial y la Call of Duty World League.
¿Qué supone todo esto más allá de una maniobra de publicidad brutal para Orange? Pues que mucho de lo que comentamos cuando se anunció el acuerdo con Mediapro empieza a salir adelante. Si grandes marcas como Orange se suman a la fiesta de los eSports eso significa más ingresos para sus principales impulsores y, a la larga, una mayor y mejor profesionalización del sector, justo lo que necesita para seguir despegando con fuerza.