Unas de las noticias que han sacudido en sector ha sido el reboot inesperado del clásico Call of Duty 4. Bajo el mismo nombre pero sin el número, Call of Duty: Modern Warfare, el nuevo juego de Activision traerá un motor gráfico inédito en la saga y la posibilidad del cross play libre y sin restricciones: juego cruzado entre PS4, Xbox One y PC.
La noticia ha sido confirmada por Candice Capen, productora de Infinity War, que ha respondido a un usuario de Twitter que tenía algunas preguntas. “Todo el mundo podrá jugar con todo el mundo”, ha contestado Capen con una sonrisa a través de la red social.
Un escenario competitivo incierto
En juegos como Rocket League, el crossplay estaba limitado entre consolas, podían jugar personas de PC y Xbox One y usuarios de ordenadores y PS4, pero no entre las máquinas de Sony y Microsoft. Las buenas relaciones de ambas compañías, al menos en términos de juego en la nube y juego cruzado, podrían haber decantado la balanza.
La polémica de otros juegos, principalmente Fortnite, hizo que Sony tuviera que abrir la posibilidad para facilitar el crossplay. La situación era clara para Microsoft, pero los japoneses tenían una posición de ventaja notable en esta generación por lo que no parecía ser una prioridad en su agenda. Aunque, finalmente, transigieron por el bien de su comunidad.
Afortunadamente, Call of Duty: Modern Warfare contará desde sus inicios con el juego cruzado, lo que podría hacer variar en cierta medida la escena de los esports. Ha habido algunos rumores respecto a la nueva liga de franquicias que tiene en mente Activision para Call of Duty: sobre la posibilidad de que se juegue en PC o que se vea afectada, al menos parcialmente, por la corriente que están tomando los deportes electrónico en ramas de la compañía como Activision Blizzard.
Imagen vía Activision