Los diseñadores de Star Wars estaban bastante perdidos con el diseño de Darth Maul, pero llegó un personaje legendario de los cómics para solucionarlo
Son muchos los personajes con diseños impactantes en Star Wars, pero uno de los favoritos indiscutibles entre los fans es Darth Maul. Su aspecto es de los más reconocibles de toda la franquicia, aunque su versión final surgió de un cambio inesperado inspirado en uno de los antihéroes más icónicos de los cómics.
En una entrevista en la página oficial de Star Wars, el artista y diseñador de Darth Maul, Iain McCaig, reveló que, al principio, el personaje iba a tener una placa de circuitos eléctricos en el rostro. Sin embargo, al día siguiente, uno de sus compañeros propuso un cambio: reemplazar los circuitos por tatuajes simétricos, algo similar al estilo de Rorschach.
"A David Dozoretz le puse literalmente una placa de circuitos en la cara. Para cuando llegué a nuestro diseñador de producción, Gavin Bocquet, había simplificado los circuitos a tatuajes -probablemente canalizando a Rorschach de The Watchmen- y de repente el diseño empezó a funcionar".
Según McCaig, el equipo creativo no estaba seguro sobre el diseño inicial de Darth Maul, pero, tras añadir sus icónicos tatuajes simétricos, la creación del personaje avanzó, y, tras varios dibujos y ajustes, nació el Sith que recordamos de La Amenaza Fantasma.
Está claro que llegar al diseño final de este personaje no fue fácil. Según McCaig, George Lucas solo le indicó que Darth Maul debía ser el nuevo Sith, sin especificar género, raza o complexión. Así, el equipo tuvo que ingeniárselas para convencer al cineasta del aspecto definitivo de este icónico villano.
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