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Escucharás voces y verás lo que no existe en esta aventura vikinga de Game Pass tan dura como necesaria

Uno de los aspectos de la vida más complejos de experimentar es el relacionado con los trastornos mentales. Un tema que no siempre ha tenido cabida en la industria y que siempre conviene visibilizar para mostrar la realidad de algunas personas. En esa tarea se sumergió Ninja Theory con uno de los títulos más queridos de los últimos años.

Tras habernos ofrecido Heavenly Sword, Enslaved: Odyssey to the West y DmC: Devil May Cry, le llegó el turno a Hellblade: Senua's Sacrifice en 2017. La obra, disponible en Xbox Game Pass, nos permite vivir una aventura durante la era vikinga en la que una guerrera celta se embarcará en un viaje onírico obsesivo.

Y es que Senua, nuestra protagonista, luchará hasta el final por el alma de su amante fallecido, aunque debe hacer frente al mismo tiempo a la psicosis que padece. El juego ha contado con la colaboración de neurocientíficos y diversas personas que sufren este desorden para ofrecer una experiencia lo más realista posible.

Lo cierto es que lo han logrado con todas las de la ley y es un juego que debes experimentar con los auriculares bien puestos. No todo lo que verás será real y no todas las voces que escuches querrán ayudarte mientras te enfrentas a peligros desconocidos. Puedes jugar tanto en Xbox One como en Xbox Series X/S, donde está optimizado para rendir a 4K. Incluso existe la posibilidad de jugar a través de Xbox Cloud Gaming. Mientras, seguimos esperando la secuela que está en marcha.

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