Tal día como hoy pero hace 25 años se puso a la venta en Japón el primer ‘The Legend of Zelda’, título que daría comienzo a una saga fundamental en la historia de los videojuegos. Lanzado en primer lugar para Famicom Disk System, llegaría a Occidente poco más de un año después, y ya usando los tradicionales cartuchos de NES que todos recordamos. Para la historia quedará como el cuarto juego más vendido de dicha consola, lo cual es mucho decir.
Con las mentes preclaras de Shigeru Miyamoto y Takashi Tezuka al frente de su desarrollo, el título supuso un notable avance para el genero de la aventura de acción, incluyendo unas posibilidades enormes para la época de exploración y de desarrollo de puzzles. Desde entonces se han vendido 59 millones de copias entre los distintos títulos que integran esta franquicia, quince de la saga principal en consolas de Nintendo e innumerables spin-offs en otros formatos.
En enero del 87 llegaría su primera secuela, ‘Zelda II: The Adventure of Link’, que introdujo notables cambios en la jugabilidad, como un desarrollo en scroll lateral y mayor componente RPG. Se mantenía eso sí a Link como protagonista, a Zelda como princesa a rescatar y a Ganon como archienemigo, una larga tradición que ha sido el principal eje de la saga durante todos estos años. Aunque no es una de las entregas mejor recordadas por los fans, cosechó unas notables ventas en su época.
La saga daría su primer gran salto de calidad con el lanzamiento en 1991 de ‘The Legend of Zelda: A Link to the Past’, sin duda alguna uno de los grandes estandartes de la mítica Super Nintendo. Recuperando la perspectiva aéra de la primera entrega, daría un nuevo nivel de profundidad a su desarrollo introduciendo el concepto de dos dimensiones paralelas, a través de las cuales tendríamos que viajar para conseguir derrotar a Ganon.
Dos años después, Link se estrenaría por todo lo alto en Game Boy con ‘The Legend of Zelda: Link’s Awakening’. A diferencia de la gran mayoría de entregas de la serie, esta versión portátil no está localizada en Hyrule sino en la isla Koholint, y nuestro objetivo no es rescatar a Zelda, sino encontrar la forma de volver a casa. A pesar de las evidentes limitaciones de esta consola, Nintendo supo mantener los grandes puntos fuertes de la serie y entregar un título a la altura.
El glorioso salto a las tres dimensiones
La aparición de los gráficos poligonales fue traumática para muchas franquicias, que no consiguieron dar el salto como es debido a este nuevo universo visual. Ese no es el caso de los ‘Zelda’, pues al igual que ocurriera con su estreno en SNES, se volvió a dar un salto de calidad abismal con la llegada de una nueva plataforma, en este caso Nintendo 64. ‘The Legend of Zelda: Ocarina of Time’ se lanzó en 1998, convirtiéndose en un clásico instantáneo, que quedará para la historia de los videojuegos como uno de sus mayores hitos.
Es sin duda alguna uno de los mejores ejemplos del saber hacer de Nintendo a la hora de adaptar sus viejas sagas a los nuevos tiempos, conservando todo el espíritu de sus predecesores y aprovechando al máximo las posibilidades de la nueva era. El famoso sistema de combate Z-Targeting, los largos paseos a lomos de Epona, sus increíbles mazmorras o su concepto de viaje a través del tiempo gracias a la música de la Ocarina, son sólo algunos de sus muchos puntos fuertes. Como ya sabéis, hay en camino un remake para 3DS.
Dos años después, Eiji Aonuma se estrenaría como máximo responsable de la saga en ‘The Legend of Zelda: Majora’s Mask’, un título que nació marcado por la alargada sombra de su predecesor, lo cual ha hecho que no sea tan bien recordado. Nintendo no se limitó a ser conservadora y apostó por explorar nuevas posibilidades, introduciendo un sistema basado en un ciclo de tres días que se repetía constantemente, y que nos obligaba repetidas veces a reiniciar el proceso para encontrar la forma de evitar la destrucción de Termina.
Entre el colorido cel-shading y las oscuras princesas
Entre los años 2001 y 2004 veríamos el estreno de hasta cuatro títulos portátiles. Primero en Game Boy Color se produciría la llegada de los gemelos ‘Oracle of Seasons’ y ‘Oracle of Ages’, desarrollados junto a Capcom y planteando bajo puntos de partida similares dos aventuras diferentes. Ya en Game Boy Advance, un año después celebraríamos el regreso de ‘A Link to the Past’ junto al multijugador ‘Four Swords’, y por último en 2004 se estrenaría ‘The Minish Cap’, desarrollado también por Capcom.
En medio de esta vorágine de títulos de bolsillo, la franquicia se estrenaría durante 2002 en GameCube con ‘The Legend of Zelda: The Wind Waker’, desarrollo muy polémico por la atrevida decisión de utilizar gráficos cel-shaded y un aspecto caricaturesco de personajes. Al final, la aventura resultó ser una absoluta maravilla, incluyendo un desarrollo único en un mundo compuesto por islas en medio del océano, a través del cual navegábamos dirigiendo el viento a nuestro antojo.
Tras este derroche de alegría y buen humor, la serie daría un giro de 180 grados con ‘The Legend of Zelda: Twilight Princess’, con una ambientación mucho más oscura y una historia más elaborada. Lanzado tanto en GameCube como en Wii, sirvió de despedida para una y de excelente bienvenida para la otra, incluyendo en el segundo caso control de movimiento para la espada. Para mi gusto, el mejor de la saga tras ‘Ocarina of Time’.
Como no podía ser de otro modo, Nintendo DS también ha contado con su correspondiente ración de Trifuerza gracias a ‘Phantom Hourglass’ en 2007 y ‘Spirit Tracks’ en 2009, último título de la serie hasta ahora. El futuro lleva el nombre de ‘The Legend of Zelda: Skyward Sword’, el cual debería llegar a Wii este mismo año para ensalzar como es debido este aniversario.
Así pues, una grandísima celebración por la que todos deberíamos brindar, incluso aquellos que no hayan tocado un ‘The Legend of Zelda’ en su vida. Y es que durante este cuarto de siglo, ha sido una franquicia fundamental en el crecimiento y expansión de los videojuegos, convirtiéndose además en todo un icono de la cultura popular moderna. Sólo nos cabe desear que podamos disfrutar, al menos, de otros 25 años tan mágicos junto a Link, Zelda, Ganon y el resto de inolvidables personajes.