En los últimos días he de decir que he tenido la oportunidad de probar varios videojuegos de conducción que estaban a punto de llegar a las tiendas y de los que os hemos ido hablando en VidaExtra. Uno de ellos fue 'ONRUSH', precisamente el que más me marcó y el que más ganas tenía de probar su versión final para descubrir si era tan buena como la demo que jugamos.
La verdad es que, partiendo del hecho de que algunos miembros de Evolution Studios están involucrados en el desarrollo de este título de Codemasters, ya inspira confianza porque al menos tienes la garantía de que detrás hay gente con talento y que sabe lo que hace. Una vez probado el juego, descubres que efectivamente es así.
El género de conducción arcade no es uno de los más comunes y dentro de los pocos títulos de este tipo que se han ido publicando a lo largo de este año, uno de los que más destaca es, sin lugar a dudas, 'ONRUSH', así que vamos a pasar a contaros a continuación los motivos en nuestro análisis.
Los equipos más salvajes son los que triunfan
La clave de 'ONRUSH' y uno de los aspectos que lo convierten en un juego muy diferente a lo que estamos acostumbrados a ver es porque da igual lo rápido que seas, eso no es lo que va a decidir si ganas o pierdes. Principalmente porque cada uno de los circuitos en los que competiremos no tendrán un fin. Si bien son pistas cerradas por las que daremos vueltas constantemente, el objetivo no será nunca el de ser el más veloz de todos.
El juego dispone de varios modos de juego, sobre los que os hablaremos más adelante, en los que, lo único que tienen en común, es que nos obligarán a demostrar lo salvajes que somos al volante. Ese es el verdadero objetivo, el competir contra el resto de vehículos y tratar de hacerlos pedazos siempre que nos sea posible, y si puede ser de la forma más bestia que se nos ocurra, mejor, para así presenciar unas escenas espectaculares.
En 'ONRUSH' lo esencial es el trabajo en equipo. Siempre, independientemente del modo que elijamos, tocará competir en grupos al enfrentarse dos bandos de seis contra seis, los azules contra los naranjas. La colaboración entre los diferentes miembros es vital para cumplir con las misiones que nos sean propuestas en cada uno de los circuitos.
Hablando precisamente sobre las pistas, todas ellas estarán ambientadas al aire libre en lugares como bosques, montañas, ciudades abandonadas y similares. Todas disponen de infinidad de rampas, piedras, muros y otros elementos con los que deberemos de tener cuidado mientras conducimos a toda velocidad para que nuestro vehículo no se quede hecho añicos mientras conducimos, pero lo mejor es que nunca habrá una ruta fija.
En cada vuelta que demos llegaremos a comprobar que por el camino hay rutas alternativas que será cuestión de los jugadores el descubrir si realmente son atajos o no para pillar desprevenidos a nuestros rivales. Más que nada porque algunas nos pueden lanzar por los aires para caer de lleno encima de los coches de nuestros oponentes y así acabar con ellos aplastándolos.
Esta es tan solo una de las formas que tendremos a nuestro alcance para volar en pedazos a los demás, aunque también podremos golpearles bien fuerte por el lateral o desplazarlos contra los elementos del escenario para que no tengan escapatoria a la hora de tratar de esquivar los obstáculos. Ahí ya dependerá del ingenio de cada uno y de lo que suceda en el momento para aprovechar la situación a nuestro favor.
En ningún caso tendremos vidas limitadas. Lo único que hará el juego es dejarnos sin conducir durante unos cuantos segundos. En el caso de que seamos nosotros mismos los que nos suicidemos, ese periodo será muy breve. En cambio, si es un rival el que acaba con nosotros, tocará presenciar la escena de la masacre y posteriormente esperar otros tantos segundos más hasta que nos devuelvan a la pista, lo que ya os decimos que, aparte de cortar bastante el ritmo, puede acabar siendo muy determinante en más de una ocasión para alzarse con la victoria.
Los modos de juego y los vehículos que harán que reine el caos
Por mucho que a veces alcancemos una velocidad de vértigo, hay que conocer bien el vehículo que vamos a pilotar para provocar unas auténticas colisiones. Para ello podremos escoger entre ocho clases distintas, desde las motos Blade y Outlaw, hasta los todoterreno Titan y Enforcer que arrasarán con todo a su paso, pasando por los veloces Vortex y Charger y los poderosos Interceptor y Dynamo.
Lo que hará especial a estas clases y las harán distintas de las demás, son sus dos habilidades pasivas y otra especial. En el modo para un solo jugador, en ocasiones el juego no nos dará la opción de escoger la que queramos y nos tendremos que conformar con la clase que nos sea asignada, aunque hay en otros circuitos en los que sí contaremos con la posibilidad de seleccionar una u otra. De hecho, en estos casos, cuando nos eliminan es el momento en el que tendremos la oportunidad de intercambiar nuestra clase por otra.
Entre las habilidades pasivas de cada clase estarán el Rush Definitivo, que servirá principalmente para proporcionar alguna ventaja para fastidiar a los contrincantes o para echar un cable a nuestros compañeros, y también el Combustible de Rush, que será la forma que hará que nuestra barra de Rush aumente sobre todo. Y es que precisamente el medidor de Rush será otro de los detalles que deberemos de tener más en cuenta mientras conducimos, aparte de ser el que da nombre al propio juego.
A base de ejecutar una conducción temeraria, saltos que desafíen a la gravedad y sobre todo eliminar a los vehículos, nuestra barra de Rush se irá rellenando. El consumirla nos permitirá emplear un turbo constante para desplazarnos a una velocidad mayor de lo normal, pero al mismo tiempo irá rellenando un porcentaje que activará la habilidad especial de la clase que tengamos, como sucede por ejemplo en 'Overwatch', para que os hagáis una idea.
Aun así, por mucho que el destruir vehículos sea una de las formas más rápidas de ganar Rush, nuestros oponentes no nos lo pondrán tan fácil, dado que son muy resistentes y la inteligencia artificial es lo suficientemente alta para que no haga que nos tiremos de los pelos, pero sí lo bastante para que suponga un reto. Es por eso mismo que los circuitos estarán plagados de vehículos de relleno cuya única función en esta vida es que arrasemos con ellos y nos los llevemos por delante, porque con un solo impacto saldrán despedidos por los aires.
Con respecto a los modos de juego, existirán cuatro diferentes, cada uno con sus propios desafíos. Por ejemplo, en Overdrive iremos obteniendo puntos a base de derrotar a los oponentes o por cómo conduzcamos, teniendo que alcanzar una cierta cantidad para ganar las diferentes rondas. En Countdown será una carrera contrarreloj en la que deberemos atravesar unos portales gigantescos que irán otorgando tiempo a nuestro equipo, por lo que habrá que evitar que los demás no los crucen.
Lockdown recuerda a uno de los típicos modos que vemos en los FPS, ya que en él tocará controlar una zona para conquistarla, con la diferencia de que esta permanecerá en constante movimiento. Finalmente, en Switch cada jugador dispone de tres vidas, cada una representada por un vehículo diferente, hasta llegar a la última en la que solo nos dedicaremos a entorpecer a los demás hasta que un equipo pierda todas sus vidas.
Más rejugabilidad de lo que parece
Ya de por sí la jugabilidad de 'ONRUSH' nos garantiza tardes repletas de competición, entretenimiento y diversión al volante, más aún si nos sumamos al modo multijugador. La campaña para un solo jugador no es que sea especialmente larga, pero sí lo suficientemente entretenida y que nos hará rejugar a veces algunos de los circuitos, divididos a su vez por eventos, como si fuesen capítulos.
Cada uno contará con una serie de circuitos a completar en los que se nos asignarán misiones principales y otras secundarias. El cumplirlas servirá para agenciarnos puntos de fama que desbloquearán más pruebas y eventos, cada uno con una dificultad superior y más capítulos a superar. Además, cada día el juego nos desafiará a completar misiones diarias para conseguir dinero o cajas de botín.
Que no cunda el pánico. Por mucho que 'ONRUSH' sea otro de los juegos que se ha sumado a la moda de las cajas, estas no serán determinantes en absoluto para ganar. En ellas únicamente se incluirán elementos para personalizar a los vehículos, los pilotos o las lápidas que dejaremos en el suelo al eliminar a alguien. Aparte de con estas misiones diarias, también obtendremos cajas cada vez que subamos de nivel.
Dependiendo de lo bien que lo hagamos en cada circuito o las acciones que realicemos, al finalizar obtendremos una serie de medallas de oro, plata o bronce que se canjearán por puntos de experiencia y por dinero, lo que servirá para conseguir más elementos para modificar el aspecto de los vehículos, los dibujos de las lápidas o la ropa de los pilotos y hasta el baile que se marcarán cuando se muestren los resultados.
Además, cada jugador contará con su propia placa identificativa. Al contrario que el resto de artículos que podemos comprar, las placas solo se desbloquearán a base de cumplir objetivos de todo tipo. Es por eso mismo que hemos señalado que 'ONRUSH' ofrece una gran rejugabilidad, porque siempre habrá algo que hacer más allá de solo competir, que ya de por sí es más que suficiente. Por otra parte, para más adelante está previsto que se acaben implementando las carreras clasificatorias en una fecha que no se ha especificado aún.
La opinión de VidaExtra
El lanzamiento de 'ONRUSH' se producirá hoy mismo en Xbox One y PlayStation 4, una compra que no debéis perder de vista si os gustan los juegos de conducción arcade. Más allá de que la jugabilidad es espléndida, visualmente cumple de maravilla con una acción que se moverá a 60 fps constantes y en la que presenciaremos ciclos de día y noche con efectos espectaculares de iluminación, al pasar por encima del agua y al destruir a los vehículos.
La banda sonora es otro de los apartados que nos acompaña a la perfección, en la que han colaborado una buena cantidad de bandas independientes con temas cargados de ritmo. Los textos y las voces también están en castellano y, de hecho, esto último se agradece porque cuando ejecutemos algún golpe demoledor a algún rival nuestro personaje soltará alguna frase para burlarse de él.
'ONRUSH' es un juego que no lamentaréis tener en vuestra biblioteca, ya sea para jugar en solitario, con amigos o con otras personas de todo el mundo. En definitiva, resulta una propuesta fresca e interesante en este género dentro de lo que podemos encontrar este año. Es inevitable que recuerde a otros grandes títulos, como 'Split/Second: Velocity' o 'Blur', pero sobre todo lo que no se puede negar es que el trabajo realizado por Codemasters y Evolution Studios vuelve a ser ejemplar una vez más.
A favor
- Lo emocionantes que resultan todas las carreras.
- Auténtica destrucción al volante como hacía tiempo que no se veía en un juego de conducción arcade.
- Gran rejugabilidad que garantiza que siempre haya algo que hacer.
En contra
- Los escenarios no son demasiados y podían haber sido más diferentes unos de otros.
- El tiempo que tardas en reaparecer cuando te elimina un rival. ¡Queremos seguir machacando!
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