Lego, junto a Warner Bros, ha encontrado un nicho muy interesante en con las adaptaciones al mundo de los videojuegos de universos de todo tipo. Crear una franquicia a partir de otras franquicias y ahora, por segunda vez, se adentran en la tierra media para recrear las aventuras de ‘El Hobbit’. Bueno, de dos terceras partes de ellas para ser exactos.
Un viaje inesperado e incompleto para Bilbo
No se puede decir que este juego de ‘LEGO: El Hobbit’ sea una adaptación de la obra literaria original sino más bien de sus más recientes películas dirigidas por Peter Jackson. Tanto es así que se han partido de muchas de estas escenas para recrear, en el mundo de los videojuegos, las aventuras de Bilbo Bolsón y compañía.
No sólo eso, también se ha partido de la división en tres partes de la versión cinematográfica por lo que en esta versión no concluiremos la historia sino que sólo recorreremos lo que hemos visto en la gran pantalla hasta la fecha. ¿Cuándo concluirá pues el videojuego? Cuando salga la película, en otro juego diferente.
Ahora bien ¿cómo se plantea Lego mantener su fórmula joven? Ya hemos visto su propuesta de caracterizar universos de todo tipo y la conocemos de sobra. Técnicamente es correcta, su humor es divertido pero las mecánicas de juego se empiezan a estancar un poco, a pesar del abanico de habilidades que introduce en cada entrega.
Los cambios en este nuevo salto de saga son pequeños, pero destacables. Tendremos a nuestra disposición un elenco de 80 personajes, cada uno con habilidades únicas y, además, con la posibilidad de combinar dos personajes, para llevarlos al mismo tiempo y poder realizar acciones conjuntas en momentos determinados del juego.
Aunque la fórmula funciona, se empieza a notar el desgaste en el concepto en LEGO: El Hobbit
Se ha añadido también un modo constructor desde el cual, con piezas específicas que iremos recogiendo a lo largo de nuestro viaje, podremos crear objetos de todo. A veces con fines meramente decorativos y otras veces para avanzar en la historia. No esperéis un editor especialmente complejo, pero sí como un pequeño cambio de aire entre saltos y mamporros.
A pesar de repetir muchos esquemas de los que ya partía, hay que reconocer que Lego ha escenificado muy bien las escenas de la película. La escapada del pueblo de los goblin en las minas es realmente divertida, variada aunque sin ambición alguna en lo que respecta a la dificultad pero, ya lo sabemos, no podemos ser especialmente exigentes en esta cuestión con Lego.
Tendremos pequeños mini juegos basados en QTE, en la demo sólo pudimos ver uno en la escena donde los inesperados invitados de Bilbo empiezan a lavar los platos lanzándolos por el aire dentro de la casa. Mecánica sencilla pero graciosa, veremos cómo lo integran en el resto del juego.
Sobre el aspecto gráfico, hemos probado la versión de PS4, podemos decir que el nivel está exactamente donde lo dejó el último juego de Lego, ambientado en el universo de Marvel. Excelente nivel de detalle en las texturas y con escenarios elaborados con mucho mimo. Al ser escenarios pequeños, no hemos podido apreciar bien la profundidad.
Conclusiones tras la primera toma de contacto
Aunque Lego tiene muy bien definido lo que quiere hacer con sus juegos, la sensación de que su propuesta se está empezando a quedar un poco anquilosada es cada vez más notable. Lo tienen todo bien atado pero en ese ejercicio de encorsetar una buena idea hacen que el juego vaya perdiendo frescura.
Los fans del universo de ‘El señor de los anillos’ disfrutarán de una aventura muy bien caracterizada y que recoge con bastante precisión el ritmo y la escenificación de las dos películas de ‘El Hobbit’. Sin embargo, si ya hemos jugado a los anteriores títulos de Lego notaremos cierto estancamiento.
Otro desacierto ha sido el hecho de lanzar el juego antes de que concluya la trilogía cinematográfica. ¿Cómo nos llegará el desenlace de Bilbo, Gandalf y compañía? ¿Tendremos un nuevo juego que aglutine las tres partes? ¿Llegará en forma de DLC o de episodio único en formato físico?
Ver 9 comentarios