Nintendo Switch se ha convertido en la consola ideal para darle mayor visibilidad a los indies. Ya sean clásicos, como Super Meat Boy (donde se igualaron las ventas iniciales de Xbox 360), o nuevos, como Celeste, los estudios independientes se han dado cuenta del tremendo impacto que tiene la consola de Nintendo en sus beneficios. Quizás en parte por su naturaleza.
Porque no es lo mismo estar atado a una televisión en casa que poder jugar desde cualquier lado, como hacíamos desde los tiempos de la Game Boy. Y en este sentido, hay juegos que se prestan más a jugarlos en modo portátil, como por ejemplo aquel A Hole New World que salió en Switch en 2018.
Su origen se remonta a KickStarter en 2015, donde el estudio español Mad Gear Games logró financiarlo con éxito y certificar su salida en Steam a primeros de 2017, con las primeras conversiones a consolas (PS4 y Xbox One) unos meses después. Lo curioso viene con Nintendo, puesto que uno de los objetivos de su campaña de financiación fue precisamente poder sacarlo también en Wii U, pero al final se tuvo que cancelar por la Switch.
Un juego que desprende aroma a los ochenta
Se notan mucho las influencias que ha tomado este estudio gaditano para dar vida a A Hole New World, un proyecto, por cierto, surgido de la Ludum Dare 30 en 2014, donde obtuvo muy buena recepción. Como decimos, este equipo afincado en Cádiz ha tomado como referencias clásicos de los 80 de la talla de Ghouls'n Ghosts, Mega Man y unas pinceladas de Castlevania.
No es solo por todo lo relacionado con el aspecto jugable, donde se inspira, por ejemplo, en el Blue Bomber de Capcom a la hora de desbloquear más pociones de ataque para el protagonista a medida que superamos fases, sino también por esa estética tan marcadamente de 8-bits. Sí, como la NES.
Que se inspire en ciertos elementos no significa que no sea original, porque A Hole New World cuenta con su propio estilo, reflejado en esa forma tan especial de atacar por medio de las pociones, ya que algunas describen una parábola, otras rebotan... No es el típico run & gun, por decirlo de alguna manera, donde el disparo sigue una línea perfecta. De ahí que la forma de afrontar las fases sea completamente distinta. Eso y por la gravedad.
Y es que la peculiaridad de todas las fases de este juego de Mad Gear Games radica en esos dos planos de juego: uno superior, como cualquier juego de plataformas en 2D; y uno inferior invertido, como si del VVVVVV se tratase.
A Hole New World esconde más de lo que se ve
Sí que es cierto que A Hole New World no explota su verdadero potencial hasta que nos adentramos en la cuarta fase. Ahí se convierte en un juego sumamente más complejo y profundo que muestra hasta dónde podría haber llegado este título si hubiese salido en la época de la NES. Porque en la actualidad, por desgracia, no lo tiene tan fácil con tanto indie de por medio.
Gráficamente, eso sí, no luce tanto como otras producciones de la máquina de Nintendo, pero va ganando enteros según conseguimos más pociones para el protagonista, Potion Master, y desbloqueamos, ya de paso, otras habilidades, como el doble salto o el deslizamiento por el suelo. Y todo para poder vengarnos del malvado ser que nos "mató" al principio de la historia.
Es, además, un videojuego con bastantes secretos en su interior, no sólo en paredes como hemos hecho toda la vida a golpe de látigo de los Belmont, sino también hablando con personas en salas ocultas y demás. No en vano hay distintos finales, según nuestro progreso. Cabe decir que se puede consultar toda la información (enemigos, NPC descubiertos, objetos y gemas) desde el menú de pausa, e incluso activar el modo speed run si queremos.
El problema es que, pese a contar con un componente rejugable para los completistas, no deja de ser una aventura que dura un suspiro. Pero una que puede venir muy bien para todo aquel que quiera retrotraerse a una época donde no importaban tanto ese tipo de cosas. Jugar y desconectar. Y ya.
- Plataformas: PS4, Steam, Switch (versión analizada) y Xbox One
- Multijugador: no
- Desarrollador: Mad Gear Games
- Compañía: Mad Gear Games
- Lanzamiento: 2017 (PS4, Steam y Xbox One), 2018 (Switch)
- Precio: 8,19 euros (Steam) | 9,99 (PS4) | 9,99 (Switch) | 9,99 (Xbox)