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Jugar a Dead Island 2 me convierte en un enajenado: ¡Soy como el maldito Tallahassee de Zombieland con música de los 80!

He esperado durante mucho tiempo el lanzamiento de Dead Island 2, como muchos fans del género. No han faltado los videojuegos de zombies durante los últimos años: World War Z, Back 4 Blood, Dying Light y los remakes de Resident Evil 2, 3 y 4, por ejemplo. Pero la secuela de Dead Island era otro rollo.

El 21 de abril de 2023 por fin se lanzó Dead Island 2 y estaba completamente preparado para lanzarme de cabeza a destrozar zombies sin ningún tipo de clemencia... pero La Fuerza tenía planes para mí. La clave de Star Wars Jedi: Survivor llegó a mis manos para su análisis, así que tuve que posponer mis planes. El 26 de abril se publicaron los análisis y el mismo día compré Dead Island 2.

Una nueva zombiaventura en Los Ángeles

El comienzo de mi aventura en Dead Island 2 no se diferencia lo más mínimo a la vuestra: la cinemática inicial muestra a los personajes protagonistas subiendo a un avión para escapar de la archiconocida ciudad. Sin embargo, alguien se convierte en zombie en el avión, el ejército lo derriba y nos estrellamos en medio de la ciudad.

Los protagonistas son variados: cuentan con diferentes niveles de resistencia, agilidad, fuerza y habilidades únicas. Seguro que muchos de vosotros os habéis decantado por los ágiles y aquellos que podrían pasar por el mundo en sigilo... pero yo no estoy para andarme con mierdas. Elijo a Ryan, un bombero que tiene todo el perfil de poner a los zombies a orbitar alrededor de Saturno de una hostia.

Atravieso los restos del avión (mientras aprendo los controles básicos) y encuentro a un grupo de bobos junto a la salida de este infierno. Uno de ellos sangra por los oídos y no escucha, otro le lame el culo a una chica famosa y otro se encuentra atrapado por piezas de fuselaje junto a su mujer desmayada.

El sordo, el lameculos y la famosa se van, y me toca hacer de héroe con la pareja. Los primeros zombies no tardan en llegar. Uso todo lo que tengo a mano para reventarlos mientras me hago al combate del juego. No es complicado... tengo experiencia sobrada con zombies.

No me ando con chorradas: la mujer desmayada despierta, se transforma en zombie, devora su pareja y me muerde cuando intento ayudarlo. Estoy jodido. Decido que es buen momento para reunirme con los bobos que se han quitado de en medio al empezar los problemas. Reviento a unos cuantos zombies por el camino y descubro las maravillosas animaciones de ejecución. ¡Me encanta la violencia desmedida en un juego de zombies!

Logro llegar a duras penas a la mansión de la chica famosa. Me han mordido, así que me reciben a punta de pistola. Me desmayo antes de saber qué van a hacer conmigo. ¡Y plot twist! Soy inmune, así que no me transformo en zombie. Mi personaje se empieza a flipar y a creerse el maldito héroe del lugar.

Camino al Hotel porque... "Trust the Plan", ¿supongo?

Si os soy sincero, no me enteré de un carajo de esta parte porque un amigo montó un grupo de voz de PS5 para contarme una movida. Lo único que sé es que mi personaje se pone en plan tipo duro con la tipa famosa y decide que es buena idea ir al Hotel Harperin para investigar.

En definitiva: me planto en el hotel. Está hasta los topes de zombies. ¡Obvio! El juego me enseña a usar el entorno como otra herramienta más contra los trozos de carne andante. Llegados a este punto, he pillado confianza con el sistema de combate... y empieza a despertar dentro de mí una parte dormida.

Avanzo con el hotel con los irritantes gritos de una loca borracha que parece estar muy enfadada con el mundo. Esta vez elijo no prestar atención porque estoy demasiado ocupado flipándolo con mi nueva llave inglesa extra grande que mete unas collejas que lo flipas. Se me empieza a dibujar una sonrisa de loco en la cara cada vez que reviento a un zombie. Mi locura personal ha comenzado.

Desactivo la música del juego y me pongo de fondo una lista de reproducción de canciones de los 80's. Pierdo definitivamente la cabeza y me vuelvo un completo energúmeno a lo Tallahassee de Zombieland cuando suena "Take on me" de A-ha mientras reviento zombies a diestro y siniestro.

Alcanzo el éxtasis al enfrentarme a un Aplastador, un tipo zombie que es un armario empotrado, vestido de novia y con "Your love" de The Outfield de fondo. Mi personaje acaba con la vida por los suelos y yo cantando el tema a voces mientras doy saltitos en mi silla. Demencia basada en hechos reales.

Mi personaje coge una radio y se pone en contacto con un doctor que busca alguien inmune. Está interesado en rescatarme. ¡Ya tenemos una excusa para que alguien mueva el culo para salvarnos! Ahora me toca volver a la mansión para contarle a la tipa rica que tenemos un plan para escapar. Pero... me entretengo por el camino.

Me encuentro con una streamer famosa justo antes de llegar a la mansión de la tipa rica. Se trata de una loca que está reventando zombies para sacar vídeos para su canal. Me pide una colaboración: ella graba y yo reviento zombies. Llegados a este punto de demencia y absurdo, acepto. Me pongo "Take Me Home, Country Roads" de John Denver (sí, el tema de Fallout 76) en bucle y vuelvo a caer en la demencia más absoluta.

Cuando acabo de ayudar a la streamer loca y llego a la mansión de la famosa, me doy cuenta de que estoy sudando y completamente reventado. Decido que ha sido suficiente violencia zombie por hoy y que es hora de una ducha y de cenar. El fin de semana no queda lejos y puedo decir con toda seguridad que estoy completamente enganchado a Dead Island 2.

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