Seguramente recordaréis con más rabia que alegría el primer DLC que vivió la historia del videojuego, aquellas armaduras para ‘The Elder Scrolls IV: Oblivion’ que sembraron el terror entre los jugadores, quienes acertadamente pensaron que esa medida podía convertirse en habitual ya no simplemente de la saga, sino también exportable a otras franquicias.
Los temores acabaron convirtiéndose en realidad y no tardamos en comprobar cómo los DLC que descargábamos no pasaban de los 2 o 3 megas. Un tamaño demasiado pequeño para incluir mapas completos y armas, por lo que quedaba claro que el contenido ya estaba en el juego y lo único que hacían era vendernos un parche. ¿Admirable? no ¿buen negocio? pues sí, y totalmente lícito y respetable, además. Pero claro, de ahí a pavonearse de contar con contenido descargable antes incluso de que el juego salga a la venta, eso ya es arena de otro costal.
El caso es que Bethesda ha anunciado un acuerdo oficial con Microsoft para que los dos primeros DLC de ‘The Elder Scrolls V: Skyrim’ sean exclusivos de Xbox 360 por un tiempo limitado. Concretamente durante 30 días. Es curioso porque sabiendo el cabreo que tienen los usuarios con este tipo de estrategias comerciales, lo único que se han limitado a decir es lo previamente comentado. Ni se sabe cuándo llegarán estos DLC ni mucho menos conocemos qué tipo de contenidos aportarán.
Sigo sin poderme llegar a imaginar el pastizal que debe invertir Microsoft en todos estos temas, probablemente extraído de los pagos de nuestras cuentas Gold. Pero lo más sorprendente de todo, lo que realmente me deja a cuadros, es que ahora todos pondrán el grito en el cielo por el tema de los DLC y cuando éste llegue a las plataformas virtuales misteriosamente acabará recaudando millones. Conmigo no contéis, eso sí, prefiero esperarme a la edición GOTY de 'Skyrim' con todos los elementos descargables incluidos.
Vía | Game Informer
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