Ahora que ha pasado tiempo suficiente, hablemos de las consecuencias del final de Far Cry 5

Tenía puestas muchas esperanzas en 'Far Cry 5', pero a la vez tenía cierto miedo por si Ubisoft pecaba de la apatía de 'Far Cry 4'. Por suerte, no solamente ha estado a la altura sino que nos ha parecido el mejor 'Far Cry' hasta la fecha.

Sus mayores bazas han sido esa libertad total desde el inicio, su variedad de misiones y los escondites de preparacionista, su impactante trama y sobre todo, el carisma de Joseph Seed, una figura mucho mejor aprovechada que la del no menos carismático Vaas Montenegro del 'Far Cry 3' del año 2012.

Como ha pasado poco más de un mes desde el lanzamiento de 'Far Cry 5', nos gustaría hablar más en profundidad de un tema: su final.

Así que a partir de ahora, mucho cuidado: SPOILERS a cascoporro.

Mi gozo en un pozo

Empezaremos, eso sí, con un pequeño repaso por los inicios de la saga 'Far Cry'. Porque todos los que vivimos su debut en aquella época lo recordamos por su potencial técnico. No fue hasta la llegada de 'Far Cry 3' donde se apostó de modo más fehaciente por el impacto narrativo con la figura de Vaas. Aunque fue un villano totalmente desaprovechado al morir a mitad de la historia.

Pagan Min, de 'Far Cry 4', por mucho que fuese otro loco, no dejó la misma huella sobre nosotros, de ahí que a Joseph Seed no le valía con ser otro fanático con aires de grandeza. Su secta tenía que ejercer un poder mayor sobre el jugador, algo que quedó patente con esas cazas cada vez que provocábamos a sus hermanos y de las que no había escapatoria posible. Esto no eran vacaciones.

La localización de este 'Far Cry 5', el primero que se sitúa en suelo norteamericano, no fue una elección baladí. Hay que fijarse en las pequeñas pistas que nos va dejando la región del condado de Hope, en Montana, donde raro es no ver algún búnker en menos de un kilómetro a la redonda.

A esto hay que sumarle una de las visiones del gozo, con una escena donde presenciamos un ataque nuclear sobre dicha región. Pero era un final que, como protagonistas, creíamos poder evitar... Craso error. Aquí no hay final feliz.

Bombas nucleares por toda la región de Hope

Resulta bastante irónico que una zona que se llama "Esperanza", la pierda por completo por culpa de un fanático que se cree Dios. Y es que, hagamos lo que hagamos, siempre se va a salir con la suya y nosotros perderemos.

Tanto si optamos por ese final del principio, a lo huevo de Pascua, como dejarlo libre tras el último combate de la historia, seguirá sometiendo al condado de Hope. Por lo tanto, nuestra labor como defensores de la ley quedaría en entredicho. Pero ninguna de esas opciones es el peor desenlace.

El verdadero marrón vendrá si optamos por apresarlo tras luchar contra él, con ese encontronazo donde nos ayudaron todos los supervivientes. Ahí soltará un mensaje de lo más revelador hasta que surge la espeluznante traca final:

"Perdónalos, Padre. No saben lo que hacen.

Cuando el cordero abrió el Séptimo Sello, se hizo el silencio en el Cielo y los siete ángeles ante Dios recibieron siete trompetas. Y hubo ruido, truenos, rayos y un terremoto... y oí una gran voz del templo, que decía a los ángeles: id y derramad las copas de la ira de Dios sobre la Tierra"

Ahí cayó la primera bomba nuclear.

Justo después, Joseph añadió: "Este es el fin".

Y comenzaron a escucharse el resto de "trompetas" por toda Hope.

En ese instante, surgió una carrera a contrarreloj para llegar al búnker más cercano, donde nos rescató uno de los supervivientes tras escapar del dominio de los Seed al inicio de la historia. Lo que no esperábamos es que, tras un accidente con un árbol, recobrásemos el sentido junto a Joseph y totalmente a su merced (y atrapados) dentro del búnker, y donde "el mundo que conocemos ya no existe".

Pero esto, de por sí aterrador, no se queda ahí, porque las últimas frases de Joseph Seed hablan del futuro del protagonista. De nuestro futuro:

"Debería matarte por lo que hiciste. Pero eres cuanto tengo. Eres mi familia. Y cuando el mundo renazca, iremos hacia la luz. Soy tu padre. Y tú mi criatura. Y juntos marcharemos a la Puerta del Edén"

No diga Far Cry 5, diga Fallout: New Hope

Tras quedarnos picuetos con ese desenlace, el menú del juego cambia por completo mostrando una visión devastada de Hope. ¿Lo malo? Que se queda en la superficie de ese detalle, porque el juego no varía ni un ápice después.

Es lo que más eché en falta, el ver a una Ubisoft que no fue capaz de ir más allá con el final y que nos permitiese disfrutar de una especie de 'Fallout: New Hope' con monstruos radiactivos y mecánicas que variasen por completo la experiencia de juego... y sin tener que recurrir al completísimo editor 'Far Cry Arcade'.

Porque ahí sí que se ha dado rienda suelta a esa fantasía, con diversos mapas que interpretan cómo sería 'Far Cry 5' después del apocalipsis nuclear.

Al menos este desenlace abre la hipotética puerta a un futuro 'Far Cry' con una ambientación de ese estilo, aunque también es cierto que, hasta la fecha, no se ha continuado la historia de ninguno de los capítulos principales...

Pero será difícil repetir su mismo impacto, sin lugar a dudas.

En VidaExtra | Análisis de Far Cry 5, el mejor Far Cry hasta la fecha